Singapur es ya la ciudad más 'inteligente', por delante de Dubai y Londres

  • Estrategias digitales

Singapur está ya la primera smart city del mundo, tras obtener las puntuaciones más altas en todos los criterios de innovación con un enfoque especial en áreas como la movilidad y el transporte como servicio, según ABI Research.

  Quizá te interese...

Los esfuerzos en estas dos áreas le permiten le permiten mantener su liderazgo en áreas como taxis y shuttles autónomos, pero también está abordando un buen número de cuestiones urbanas relacionadas con la alta densidad de la población.

El ranking de ABI Research evaluó 10 megaciudades: Nueva York, Los Ángeles, París, Londres, Dubai, Beijing, Shanghai, Singapur, Tokio y Seúl, valorando distintos criterios de innovación e implantación en función de métricas verificables, como congestión del tráfico, calidad del aire, PIB, ratios de criminalidad, etc. En términos de innovación, se valoró sus planes de despliegue de tecnologías disruptivas para dar respuesta a los retos de las grandes urbes del futuro en temas como la movilidad, el transporte, la energía, la educación, la sanidad y los servicios públicos.

"Singapur y Dubai, en el segundo puesto, Ambas destacan en la mayoría de los criterios analizados. “Emergen como líderes y sobresalen en innovación en términos de adopción de tecnologías de próxima generación y paradigmas disruptivos con soluciones estructurales para problemas difíciles.  Dubai lidera el camino en la implementación de registros distribuidos, y prevé que todas las transacciones gubernamentales sean procesadas mediante la tecnología blockchain para 2030", resume Dominique Bonte, vicepresidente de End Markets de ABI Research.

 

El tercer lugar es para Londres y se debe en gran medida a sus políticas avanzadas de datos abiertos que permiten un ecosistema más amplio de desarrolladores de aplicaciones de ciudades inteligentes y startups. Al igual que ciudades como Nueva York, París, Tokio, Seúl y Los Ángeles, llevan a cabo un gran número de iniciativas pero no son tan ambiciosas a la hora de adoptar tecnologías y paradigmas transformadores. También suelen tener dificultades con una o más métricas de implementación, como la delincuencia, la congestión o el coste de la vida.

Sorprendentemente, Shanghai y Beijing son las más retrasadas en este ámbito, según las métricas de ABI Research, que las sitúa en el noveno y décimo lugar, respectivamente. A pesar de los esfuerzos de ambas ciudades para implementar tecnologías como medidores inteligentes y redes inteligentes, bicicletas compartidas, electrificación de vehículos, estacionamiento inteligente y tarjetas inteligentes, tanto Shanghai como Beijing continúan enfrentando grandes retos relacionados con la congestión y la contaminación y se descuelgan de las otras ciudades del desarrollo económico en términos de PIB per cápita.

No obstante, la consultora dice que tienen un gran potencial de mejorar su clasificación en el futuro a medida que continúan desarrollando sus soluciones de ciudades inteligentes desde tecnologías básicas centradas en sensores hasta enfoques más avanzados y, además, se pueden beneficiar de la experiencia adquirida de pruebas realizadas en ciudades más pequeñas de China.