Coronavirus: Cómo está afectando a las industrias de semiconductores y memorias

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Semiconductores

En comparación con la industria OSAT (Ensamblaje y examen externo de semiconductores), la industria de la fundición se verá menos afectada por el coronavirus.  El motivo no es otro que este segmento está más automatizado. A pesar de esto, el informe de TrendForce recuerda que los “toque de queda” impuestos por las autoridades chinas para evitar la propagación de coronavirus, y teniendo en cuenta que la mayoría del personal que trabaja en este segmento no vive en las ciudades, reducirán la producción más de lo previsto.

“Dado que el brote aún no se ha contenido de manera efectiva” TrendForce cree que esta reducción afectará considerablemente a la industria OSAT. Conocer cuándo se recuperará la demanda es algo “que está por verse”.

Dentro del sector de semiconductores, será la industria de diseño de circuitos integrados la que menos notará el impacto del coronavirus. Esto se debe, principalmente, a que los principales jugadores de este segmento han estado apostando por entornos de diseño y verificación basados en la nube, con lo que los diseñadores “pueden compensar las deficiencias operativas y de producción relacionadas con que sus empleados trabajen desde casa”.

Memoria

La casualidad ha querido que la infección se produjese cuando gran parte de trabajadores se habían desplazado fuera de sus áreas de trabajo con ocasión del año nuevo chino. Cuando han necesitado retornar a sus puestos de trabajo, el flujo de personas se vio bloqueado para minimizar las posibilidades de un contagio.

Esto ha comenzado a afectar a diferentes industrias, entre ellas la de memoria, que, tras unas semanas de excesivo optimismo, ya reportan los primeros efectos negativos que está teniendo el virus. La capacidad de producción se está viendo afectada por la falta de personal, pero el problema más grave proviene de la escasez de materiales, ya que el flujo de mercancías también supone un riesgo importante de contagio y se está regulando de forma más estricta.

Las previsiones de la industria de memoria son que ambos problemas van a aumentar de cara al segundo trimestre, ya sea que la epidemia avance o que no lo haga, ya que la escasez de mano de obra y de materiales y componentes no se va a mitigar hasta que la situación vuelva a la normalidad.

Además, hay que tener en cuenta que muchos de los materiales y equipos empleados para fabricar chips de memoria provienen de países extranjeros, que están limitando cada vez más sus operaciones comerciales con China para bloquear la posibilidad de expansión del virus de la neumonía.