Se superan los 21 millones de apps móviles maliciosas

La compañía Trend Micro ha hecho un repaso de algunos de los momentos clave en la historia del malware móvil en estos últimos años, la cual comienza en 2004 con la existencia del gusano Cabir, que se transmitía por Bluetooth.

Apple ha presentado ya el nuevo iPhone X, que coincide con el décimo aniversario del lanzamiento de este terminal. Durante este tiempo, su aparición, junto con un buen número de teléfonos inteligentes que lo han acompañado, ha supuesto una revolución para todos, pero también ha traído consecuencias para la ciberseguridad. De hecho, hoy en día, el número total de apps móviles maliciosas se sitúa en 21.400.000, con nuevas amenazas llegando a las tiendas de apps cada día.

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Precisamente, para alertar sobre este hecho, la compañía Trend Micro ha hecho un repaso de algunos de los momentos clave en la historia del malware móvil en estos últimos años, la cual comienza en 2004 con Cabir, un gusano que se difunde a través de dispositivos habilitados para Bluetooth como los Nokia 6600 y N-Gage, el Panasonic X700 y Siemens SX1. Si bien era inofensivo, sí es cierto que entraba en el teléfono y mostraba en la pantalla la palabra “Caribe”.

A continuación, hay que remontarse hasta el año 2009 para detectar el primer gusano para iPhone, una destreza del hacker Ikee. Este gusano infectó teléfonos con jailbreak que no habían cambiado su contraseña por defecto. Y al año siguiente se lanzó la primera pieza de malware para Android. Denominado 'Fakeplayer', enviaba costosos SMS a números premium en Rusia.

A partir de ahí, 2011 fue un año prolijo en temas de seguridad móvil. Por ejemplo, se descubrieron importantes vulnerabilidades en Siri, gracias a las cuales los hackers eran capaces de interceptar las solicitudes de voz de Siri y manipular los resultados. Además, uno de los investigadores de seguridad de Apple encontró un agujero de seguridad en iOS, que permitía a las apps coger código no firmado de servidores de terceros, y añadirlo a una app después de haber entrado en la App Store de Apple. Y también se descubrió la existencia del malware DroidDream, presente en más de 50 apps de Android, el cual enviaba datos de usuario directamente a los hackers.

En 2012 apareció el primer malware para iOS: “Find & Call”, que recolectaba secretamente datos de las libretas de direcciones de los usuarios y los enviaba al servidor del desarrollador. Con todo ello, llegamos a 2013, año en el que se sobrepasó los mil millones de programas maliciosos para móviles y apps de alto riesgo. De ellas, el 75% realiza rutinas maliciosas directas, mientras que el 25% muestra rutinas dudosas, que incluyen adware. Lo asombroso es que esta cifra de programas maliciosos se duplicó al año siguiente, cuando se cumplía el décimo aniversario de la existencia de Cabir.

Para finalizar este repaso, hay que mencionar el primer ataque de alto perfil que golpeó a la App Store de Apple en 2015, XCodeGhost, que infectó más de 4.000 apps en la App Store, mucho mayor de los 25 inicialmente reconocidos por Apple; y la llegada en 2016 de Pokemon Go a la App Store, lo que permitió crear versiones maliciosas del juego y apps de ayuda relacionadas que bloqueaban las pantallas y suministraban scareware y adware.