¿Mejorará ChatGPT la productividad de las empresas?

  • Opinión

José Martí Parreño

ChatGPT está generando una considerable atención mediática en torno al impacto que va a tener la inteligencia artificial en diferentes ámbitos de la actividad humana, incluida la actividad empresarial.

Tribuna de Opinión de José Martí Parreño, Vicerrector de Investigación y Transferencia en la Universidad Internacional de Valencia (VIU)

Una ventaja de analizar el impacto de esta herramienta de deep learning generadora de texto es que puedes preguntarle a ella misma. Por ejemplo, si le preguntas “¿cómo ayudará ChatGPT a mejorar la productividad de las empresas?”, te responde lo siguiente: “ChatGPT ayudará a mejorar la productividad de las empresas al mejorar la comunicación entre los miembros del equipo. Esto permitirá a los equipos abordar problemas de forma más eficiente, compartir información de forma más rápida y trabajar en conjunto más eficazmente. Al facilitar la comunicación entre los equipos, ChatGPT también les permitirá ahorrar tiempo y reducir los costos operativos al simplificar los procesos”. Tras esta respuesta inicial puedes pedirle a ChatGPT que elabore un poco más su respuesta, a lo que responde: “Más importante aún, ChatGPT también ayudará a mejorar la productividad de las empresas al proporcionar una plataforma para la colaboración en tiempo real. Esto permitirá al equipo trabajar juntos de forma simultánea para resolver problemas complejos de forma más rápida. Esto le permitirá a las empresas obtener mejores resultados en menos tiempo”.

Por si fuera poco, puedes poner a prueba su pensamiento crítico preguntándole “¿en qué medida puede perjudicar ChatGPT la productividad de las empresas?”, a lo que responde: “ChatGPT puede perjudicar la productividad de una empresa si se usa de manera inapropiada. Esto puede suceder si los miembros del equipo usan ChatGPT como una herramienta para chatear con fines personales en lugar de para discutir temas relacionados con la empresa. Esto puede distraer a los miembros del equipo y afectar negativamente la productividad de la empresa”. Hasta aquí todo parece hilvanado con una lógica más que razonable. Poniendo aún más a prueba la herramienta se le puede solicitar más efectos negativos de su uso en el ámbito empresarial: “Además, si los miembros del equipo no tienen una estrategia clara para el uso de ChatGPT, esto puede llevar a confusión y malentendidos. Esto puede ralentizar el proceso de discusión e intercambio de ideas y, por lo tanto, perjudicar la productividad. Por lo tanto, es importante que las empresas establezcan una estrategia clara para el uso de ChatGPT”.

Junto a estas respuestas generadas por la propia herramienta, podemos ya vislumbrar algunas de sus ventajas e inconvenientes en el ámbito de la empresa. Por ejemplo, ChatGPT puede realizar buenas síntesis y resúmenes de cuestiones complejas plantadas con lenguaje natural (por ejemplo, “¿qué factores hay que tener en cuenta para desarrollar una buena promoción de ventas?”). Incluso puedes preguntarle la bibliografía que ha utilizado para generar su respuesta. En ese sentido, puede ser lo más parecido a un experto sobre la materia al que le realizaras una consulta similar y del que esperas algunas recomendaciones o consejos básicos. Más aún, puedes pedirle que te sugiera cinco ideas originales para desarrollar una campaña de promoción de ventas. Y es aquí donde se pueden empezar a percibir algunas diferencias entre la inteligencia artificial y la creatividad humana. Las respuestas son válidas, e incluso pueden ser útiles, pero parece poco probable que obtuvieran un premio a la campaña de promoción de ventas más original de 2023 (y eso a pesar de que algunas ideas sugeridas iban desde crear un concurso de fotos en Instagram para promocionar los productos hasta desarrollar un juego de realidad virtual en el que los jugadores pudieran explorar un mundo virtual creado alrededor de los productos). Es aquí donde no debemos olvidar que por muy poderosa que sea esta herramienta no deja de ser un deep learning alimentado con miles de millones de datos y referencias del pasado. Más concretamente, su entrenamiento llega hasta 2021. Es decir, puede sugerir ideas con experiencias pasadas acumuladas, pero resulta más difícil que proponga una idea radicalmente innovadora que no se haya realizado hasta el momento y no figure en su banco de datos. No obstante, es justo resaltar que las ideas sugeridas pueden servir a modo de brainstorming sobre el que trabajar posteriormente y con el que alimentar o elaborar propuestas posteriores.

Seguramente, como pasa con cualquier otro desarrollo tecnológico, será finalmente un ser humano quien pueda extraer lo mejor o lo peor de esta herramienta en función de su expertise y conocimiento sobre la materia y el resultado final que espera obtener de su uso. El potencial es enorme y estamos solo en los inicios de un nuevo contexto de colaboración entre la inteligencia humana y la inteligencia artificial. Entre la capacidad de análisis de datos computacional y esa chispa de genialidad humana tan difícil de definir y tabular y capaz de sorprendernos con ideas innovadoras que cambian radicalmente el modo de hacer las cosas.

El Dr. José Martí Parreño es Doctor por la Universidad Politécnica de Valencia (2002) y por la Universidad de Valencia (2015). En la actualidad desempeña el cargo de Vicerrector de Investigación y Transferencia en la Universidad Internacional de Valencia (VIU). A lo largo de su carrera académica ha impartido cursos y seminarios en más de una veintena de Universidades tanto en España como en el extranjero. Ganador del Premio Wilson en innovación educativa en 2015, en la actualidad dirige diversos proyectos de investigación sobre el uso de la gamificación en educación, emprendimiento y desarrollo competencial.