Habilidades que facilitan la entrada al universo tech

Las profesiones tecnológicas serán el motor del empleo y, para entrar al mundo IT, la adopción de ciertas habilidades se convierte en algo fundamental para los profesionales.Sin embargo, los skills cambian conforme la transformación tecnológica avanza para unas necesidades u otras. Por ello, es importante que las personas que se encuentran en el mundo digital, o quieran entrar, estén atentas a la dirección que toman las empresas para captar talento. 

Como cada año, la escuela tecnológica Ironhack reúne a importantes influyentes en el mundo de los recursos humanos en el Barcelona Tech Recruitment Scene 2024, un evento que ha contado con Patricia Villanova, Human Capital Director en Raona; Leticia Gonzalbez, Marketing Director en Sesame HR; Ariadna Diaz, Executive Manager en W Executive España y Mireia Sarabia, Manager Consultant en PageGroup, para saber qué necesitarán los perfiles tecnológicos de cara a los nuevos cambios que viven las empresas con la transformación digital.

En esta reunión se destacaron las diferentes aptitudes que deben tener los profesionales TI, y cuáles serán las habilidades más buscadas por las entidades. Con esta iniciativa, la escuela ayuda a mantener a todas las piezas del puzle: empresas (empleadores), escuelas (formadores), estudiantes (futuros trabajadores) en el diálogo de cómo se mueve el mercado y sus demandas.

Pensamiento analítico e innovación. La habilidad de analizar datos, extraer información y generar soluciones originales y efectivas, será una de las principales habilidades que se buscarán en los profesionales. Por ejemplo, aplicar algoritmos de aprendizaje automático, redes neuronales y conjuntos de datos masivos, pueden ser algunas de las aptitudes que las personas pueden utilizar en sus CV para captar la atención en los departamentos de recursos humanos.

Estrategias de sostenibilidad. La necesidad del cuidado del planeta se convierte en una de las características más importantes para las empresas. La conciencia y el compromiso con el medio ambiente es primordial, por ello, el impacto social de las actividades tecnológicas que se realicen será uno de los principales objetivos. Reducir las emisiones de carbono, optimizar el uso de los recursos y promover la equidad, serán algunas de las habilidades a destacar. 

Aprendizaje activo. La disposición, la capacidad de adquirir y la constante actualización de los profesionales se convierte en algo básico para que las empresas puedan anticiparse a las nuevas necesidades. A través de la formación constante, las empresas también comenzarán a invertir para dar a sus empleados una proyección futura dentro de las entidades. El objetivo es utilizar plataformas de aprendizaje que capaciten a los empleados a la transformación digital.

Inteligencia Artificial (IA). La ya conocida Inteligencia Artificial seguirá en auge y, a pesar de que las entidades gubernamentales tengan que definir cómo implantar esta nueva tecnología, saber trabajar con ella es ya una de las habilidades más requeridas. La capacidad de crear contenidos de una manera más eficaz y automatizar procesos hará que las empresas ganen tiempo y, a su vez, puedan tener un mayor rendimiento. Sobre todo, esta habilidad será clave cuando las empresas comiencen a implantar la reducción de la jornada laboral, que pasará de 40 a 38,5 horas semanales. 

Gestión de proyectos. El talento senior es uno de los más buscados. La capacidad de coordinar y liderar personas y máquinas será demandada por las entidades para resolver posibles problemas complejos que surjan, así como para detectar oportunidades emergentes. Planificar, ejecutar y evaluar proyectos de innovación digital son aptitudes fundamentales para formar parte de las plantillas tecnológicas. Para las entidades, captar un talento capacitado en saber gestionar la nueva transformación digital y adelantarse a los cambios que pueden surgir es uno de los principales retos. Por ello, que los profesionales que se incorporen en sus plantillas cumplan las habilidades requeridas será el motivo para seleccionar y descartar a la hora de contratar.