Más de una cuarta parte de las empresas españolas están poco preparadas para una ciberguerra
- Seguridad
Tres de cada cuatro organizaciones españolas están preocupadas por el riesgo de una ciberguerra, y más de una cuarta parte de las empresas españolas se sienten poco preparadas para hacer frente a una situación de este tipo. Son conclusiones de un informe de la firma de ciberseguridad Armis, que apuntan a que más de la mitad de las empresas consultadas han paralizado o abandonado proyectos digitales por la posibilidad de que se produzca.
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Las consecuencias de la guerra de Ucrania se han dejado sentir en el plano humano, económico y social, y también ha provocado tensiones geopolíticas que hacen que planee la sombra de una ciberguerra. Así lo plasma el estudio "Estado de Ciberguerra", cuyos resultados preliminares ha avanzado Armis, especialista en visibilidad y seguridad de activos.
El estudio, realizado a partir de más de 6.000 encuestados en 14 países (incluido España) de múltiples sectores, indica que el 74% de las compañías están preocupadas por el impacto que supondría la guerra cibernética para su organización, frente a un 26% que no se toma en serio la amenaza. La inquietud que muestran las organizaciones españolas es mayor que la que tienen en países de nuestro entorno como Italia (56%), Portugal (38%), Alemania (40%) o Francia (34%)
Además, más de una cuarta parte de las organizaciones españolas se sienten poco preparadas para hacer frente a la ciberguerra. Pese a ello, el elemento de seguridad menos valorado entre los profesionales de TI, no solo de España sino del mundo, es la prevención ante los ataques de Estados nación (22%). La protección de los datos (67%) y la detección de intrusiones (58%) se mantienen como las máximas prioridades en nuestro país.
Impacto en los proyectos de TI
El riesgo de ciberguerra ya está afectando a las decisiones de TI. Más de la mitad (53%) de los profesionales de TI españoles encuestados afirman que sus organizaciones han paralizado temporalmente o han abandonado proyectos de transformación digital debido a esta amenaza. Es un porcentaje menor al registrado en países como Australia (79%) y Estados Unidos, y bastante más elevado que el otros, como Japón (32%) o Portugal (35%).
En línea con el dato anterior, el 58% de los encuestados españoles están de acuerdo en que la amenaza de la ciberguerra puede suponer un freno a la digitalización, una cifra incluso superior a la media europea (51%).
Además, el 83% de los encuestados están de acuerdo en afirmar que existe una carencia de soberanía digital e inversión en la legislación española en referencia a la ciberseguridad, y solo aproximadamente la mitad (52%) de los encuestados españoles señalan que confían en la capacidad del gobierno para defenderse en una ciberguerra, cifra algo inferior a la de Francia o Italia (66% en ambos casos) y similar a la de Portugal.
Incremento de ciberamenazas desde el inicio del conflicto
El 39% de los encuestados nacionales, ada diez (39 %) de aquellos profesionales españoles de TI que toman las decisiones sobre seguridad TIC reconocieron haber experimentado más actividad de amenazas en su red entre abril y octubre de 2022 en comparación con los seis meses anteriores, una cifra en línea con la media europea (40%), pero algo menor si se compara con la media mundial (54%).
De hecho, un número similar, el 34% de los ejecutivos españoles con perfil de CTO, CIO y CISO encuestados experimentaron más actividad de amenazas durante el mismo periodo de tiempo, especialmente en el sector de las infraestructuras críticas (70%), alimentación y bebidas (36%), o fabricación e ingeniería (35%).
Según Vesku Turtia, director general de Armis Iberia, “los actores del Estado nación siguen evolucionando en sus actividades y las infraestructuras críticas se están convirtiendo en su principal objetivo en un entorno de ciberguerra. La amenaza constante de hackeos dirigidos a las redes eléctricas, los sistemas de transporte o las instalaciones de agua son una importante vulnerabilidad de cara al futuro. En 2023, esperamos ver ataques de ransomware y malware más focalizados, así como una mayor convergencia TI/OT, lo que hace imprescindible contar con soluciones diseñadas para identificar, supervisar y proteger los activos digitales de la Industria 4.0, ahora y en el futuro”.