La combinación de Cloud y DevOps mejora la entrega de software

Aparte de esto, el documento revela que se entrega el software 2,6 veces más rápido, se mejora un 99% la predictibilidad del rendimiento del software, un 109% la calidad del software y un 108% la experiencia de usuario respecto a los modelos de desarrollo y entrega de software tradicional. A todo ello hay que añadir que el control de costes sobre las herramientas y los servicios que utilizan los equipos DevOps es tres veces mejor. Los resultados, por tanto, muestran las ventajas en la entrega de software para cualquier compañía en términos de coste, calidad y eficiencia.

Quizá te interese... Cómo debe ser el Centro de Datos de Nueva Generación Primeros pasos para proteger tu negocio 7 sugerencias para mejorar la carga de tu web o app Infraestructura hiperconvergente para oficinas remotas y sucursales Cómo superar los desafíos de TI en las pequeñas empresas La empresa digital: transformando las TI con nuevas infraestructuras

Por eso, partiendo de esa base, el estudio ofrece algunos consejos que las compañías pueden aprovechar para responder a las necesidades de sus clientes en cualquier despliegue. En primer lugar, deben optar por una gestión ágil. Y es que estas nuevas capacidades acortan la distancia entre la autonomía del empleado y la estrategia de la compañía con un grado de flexibilidad en los procesos sin precedentes, al dar soporte a metodologías organizativas como Scrum o Kanban a nivel de los equipos.

Seguidamente, recomienda la gestión de las API, con soluciones que soportan el ciclo de vida completo de éstas en arquitecturas modernas y para crear microservicios; la analítica, que ofrece detalles sobre el tiempo dedicado a cada paso en el ciclo de vida de desarrollo del software para una entrega más rápida; y la integración de operaciones mainframe con herramientas de automatización para impulsar el aprendizaje automático y dotar de inteligencia operacional con umbrales dinámicos en tiempo real.

Finalmente,aconseja también usar DevSecOps, que incorpora seguridad a lo largo del ciclo de vida completo del software. Al detectar y resolver defectos de seguridad en todo el proceso de desarrollo, las empresas pueden reducir el riesgo asociado a la fuente más habitual de brechas de seguridad, los ataques en la capa de aplicaciones.