'La Inteligencia Artificial se aplicará de forma transparente y ubicua para los usuarios, obteniendo beneficios que repercutirán en la mejora de todos los servicios', Francisco José Ruíz, Atos

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Francisco José Ruiz, Atos

Francisco José Ruíz, Business Platform Solutions CTO de Atos Iberia, explica el potencial en la relación TIC e IA.

El término Inteligencia Artificial es tan amplio como cloud. ¿Cuál es, en su opinión, lo más importante de IA? ¿Por qué?

Efectivamente, el término Inteligencia Artificial es tan amplio como vago, y abarca tantas tecnologías que de una u otra manera están relacionadas (Machine Learning, Cognitive Computing, Deep Learning,…), que es complicado realizar una catalogación sencilla.

Desde nuestro punto de vista, lo más importante de la Inteligencia Artificial es la posibilidad de su integración en prácticamente cualquier ámbito tecnológico, tanto en plano personal (dispositivos móviles, medios de entretenimiento, reconocimiento de imágenes, asistentes inteligentes, automóviles, …) como empresarial (sistemas analíticos, predictivos, soporte a la decisión, …). La Inteligencia Artificial está empezando a estar presente en casi cualquier disciplina, en la mayor parte de los casos de forma transparente e invisible para el usuario, lo que le convierte en un elemento ideal y esencial en el desarrollo tecnológico.

 

¿Cuáles serían sus mayores beneficios?

Los beneficios que puede aportar la Inteligencia Artificial son múltiples, desde el punto de vista personal, la mejora en la experiencia de usuario y la incorporación de nuevos productos y servicios, como sistemas de entretenimiento, recomendación o diagnóstico. En ámbito empresarial las posibilidades se multiplican y pueden permitir mejorar los servicios, la competitividad y la operación. La Inteligencia Artificial puede aplicarse tanto a los sistemas de información (sistemas analíticos, predictivos, …) como a la automatización de tareas (RPAs, asistentes). Supone por tanto un elemento clave de cara a mejorar la competitividad de las empresas en los próximos años.

 

¿Y sus principales hándicaps u obstáculos con los que se tienen que enfrentar?

Los principales hándicaps pueden referirse por una parte a la limitada disponibilidad de personas con competencia real en esta disciplina (aspecto en el que se está trabajando de forma importante por parte de todos los sectores) y por otra en las limitaciones técnicas para su adopción. En este sentido hay que pensar que su implantación requiere en muchos casos de la adopción de tecnologías como cloud, sistemas de supercomputación o de analítica de datos/big data que no siempre están disponibles, reseñar en este sentido los problemas para la obtención de datos suficientes para entrenar las redes de Deep Learning. La adopción de la Inteligencia Artificial y la obtención del rendimiento en su máximo potencial requerirá que las compañías lleven a buen término sus estrategias de transformación digital en las que están ahora inmersos.

 

¿En qué estado se encuentra la IA? (tanto en desarrollo de la tecnología como en implantación y aceptación por parte del mercado)

Distintos estudios estiman que alrededor del 80% de las empresas cuentan en la actualidad, o piensan incorporar elementos de Inteligencia Artificial a sus sistemas. Este dato nos da una idea del nivel de aceptación por parte del mercado, y la concienciación de cara a su adopción. Desde el punto de vista de la tecnología, en la actualidad existen todos los elementos requeridos para su adopción, tanto a nivel de infraestructura, como de integración, gestión de la información y metodología. Compañías como Atos trabajan activamente en la definición del roadmap para ayudar a nuestros clientes a identificar las oportunidades y, a partir de la situación actual y la estrategia de Transformación Digital, definir el camino para la adopción de la tecnología y las oportunidades de negocio y operativas de la Inteligencia Artificial.

 

¿Cómo está cambiando la tecnología gracias a la IA? ¿Cómo lo hará en el futuro?

El desarrollo de la Inteligencia Artificial se ha apoyado en tres elementos clave, por una parte los algoritmos orientados a Inteligencia Artificial, muchos de ellos clásicos (Redes Neuronales, Redes Bayesianas, …) pero que se han desarrollado de forma específica con la tecnología actual (Deep Learning, …), por otra parte  la mejora de la capacidad de proceso y el desarrollo de tecnologías orientadas a maximizar su proceso (CPUs, GPUs, FPGAs, ASICs), y por último la disponibilidad y el tratamiento masivo de datos (Big Data, In Memory Analytics, …). El futuro depara la potenciación de todos estos elementos: el desarrollo de nuevos algoritmos que ya están obteniendo resultados prometedores (basados en Aprendizaje No Supervisado, Generative Adversarial Networks, …), mejoras en la capacidad de cómputo con la creación de tecnologías hardware específicas (incluso en dispositivos personales), y del mismo modo en la disponibilidad de datos (despliegue masivo de IoT). La Inteligencia Artificial se aplicará de forma transparente y ubicua para los usuarios, obteniendo beneficios que repercutirán en la mejora de todos los servicios.

 

¿Y los negocios? ¿Cómo están cambiando?

La Inteligencia Artificial se está incorporando con un elemento clave de los negocios. La adecuada implantación de la Inteligencia Artificial puede hacer que una empresa de pequeño tamaño compita con empresas de mayor rango (analíticas de datos, sistemas de recomendación, automatización,…). Las empresas están incorporando la tecnología como base para la competitividad y la prestación de nuevos servicios, así como el diagnóstico y aplicación de mejoras operativas. Pensemos en la predicción del comportamiento de los mercados, la gestión de stock, la optimización los recursos, la automatización de tareas y la reducción general de costes operativos. Atos está ha implantado proyectos que suponen ahorros de costes por una mejora en la gestión de recursos superiores al 80%, sistemas analíticos predictivos que van desde el tráfico de las ciudades hasta la satisfacción de clientes o la previsión de desastres naturales… y que, en definitiva, ayudan a nuestros clientes a mejorar de forma ostensible su competitividad.

 

¿Pueden las empresas implantar proyectos de IA? ¿Cómo?

En realidad, en este momento, la adopción (o al menos la evaluación) de proyectos que incluyan componentes de Inteligencia Artificial es una obligación por parte de las empresas, y es además uno de los desafíos que tienen presentes todos los CIOs en la actualidad. De los 5 puntos referidos como elementos clave para los CIOs en la encuesta de Gartner 2017, todos tienen algún tipo de relación con la Inteligencia Artificial y tres de ellos (Analítica Avanzada, Algoritmos de Negocio y Machine Learning) están directamente relacionados con esta.

Como base para le implantación de proyectos, es imprescindible fijar los objetivos en el marco de la estrategia global de Transformación Digital, y habilitar las tecnologías necesarias para su implantación. La infraestructura necesaria, la estrategia de migración a la nube, la disponibilidad de datos y las capacidades analíticas junto con la implicación de las áreas de negocio. La gran mayoría de las empresas tienen presente todos estos elementos como palancas necesarias para su evolución. Requerirán no obstante piezas fundamentales que guíen la estrategia, y recursos especializados que orienten a las áreas de negocio sobre las posibilidades. Empresas como Atos deberán jugar un papel fundamental en el soporte a las empresas de cara a definir y ejecutar estas estrategias, proporcionando tanto las tecnologías que habiliten los cambios, como las oportunidades de negocio que puede ofrecer la Inteligencia Artificial en cada uno de los mercados.

 

¿Qué debe tener en cuenta el CIO a la hora de realizar estos proyectos? ¿Se puede hablar de una infraestructura base a partir de la cual construir este proyecto?

Tal como se ha indicado, la Inteligencia Artificial está presente en la agenda de la mayoría de los CIOs. Los elementos a tener en cuenta se deben enmarcar en la estrategia general de Transformación Digital de las empresas, de hecho la mayoría de los componentes (infraestructura, datos y algoritmos orientados al negocio) deben estar contemplados en dicha estrategia. La transformación puede suponer un impacto importante tanto en la tecnología como en la propia organización, la base debe construirse sobre una plataforma tecnológica madura (idealmente con capacidad de desplegarse en la nube), la disponibilidad de datos que permitan la creación de analíticas avanzadas y los elementos necesarios para su traslación a las áreas de negocio. Se debe trabajar por tanto de forma intensiva en las áreas de IT y Negocio, con el objetivo claro de beneficiarse de las ventajas competitivas que puede aportar una adecuada estrategia de implantación de la Inteligencia Artificial.

 

IA viene envuelta en ciertas polémicas y temores. ¿Cree que es necesario regular esta tecnología antes de que esté implantada para evitar riesgos? ¿O considera que estos temores (como la posible dominación de las máquinas sobre los hombres o el sesgo que tienen) son injustificadas? ¿Por qué?

Cualquier tecnología ha tenido algún tipo de regulación en términos de privacidad, seguridad, etc. El hecho de que pueda haber algún tipo de regulación sobre la Inteligencia Artificial no debería extrañarnos, la cuestión es qué riesgos puede implicar el desarrollo de la tecnología. Las implicaciones morales de la Inteligencia Artificial son múltiples, por ejemplo, puede utilizarse, de hecho, se utiliza, para determinar la orientación sexual de clientes o usuarios, ¿es lícito o moralmente aceptable realizar este tipo de sesgo? Evidentemente no es un aspecto que esté regulado en este momento, y no es un tema sobre el que haya conciencia o alarma social, pero es algo que en algún momento podría regularse. Pueden ser necesarias ciertas limitaciones para evitar abusos de poder, falta de transparencia (los algoritmos utilizados suelen ser muy opacos), o efectos no deseados que redunden en perjuicio de las personas. Existen además voces que reclaman limitar la gestión de datos básicos que están ahora mismo en poder de las compañías que controlan los principales servicios de internet, y que ejercen de facto un monopolio en este tema.

Adicionalmente, el debate está centrado sobre la posible capacidad de las máquinas a la hora de tomar decisiones que pongan en riesgo a las personas. Personalidades como Elon Musk o Stephen Hawking defienden que esté regulado y limitado. Este punto es un debate antiguo y recurrente en la literatura de ciencia ficción, lo han tratado clásicos como Isaac Asimov o Arthur C. Clarke, ¿existe la posibilidad de que la tecnología ponga en peligro la vida de las personas? Es posible, pero desde luego no previsible a corto plazo, y es algo que no debería preocupar. Sí sería necesaria posiblemente algún tipo de regulación en su aplicación en tecnología militar, no por su capacidad de decisión en torno a la posible dominación de los hombres, sino en cuanto a su capacidad destructiva.

 

Esta entrevista es una de las realizadas para la elaboración del reportaje En Portada de IT User 29. Puedes leer el resto de las entrevistas en este enlace, y descargar la revista, de forma gratuita, aquí.