La ciberseguridad: la base invisible del progreso digital
- Opinión
?Así como los ciberataques han evolucionado en sofisticación y alcance, también lo ha hecho la tecnología empleada para combatirlos. En un escenario donde cada vulnerabilidad puede convertirse en una puerta abierta al robo de información, la calidad del hardware y de las soluciones de seguridad es ahora un factor determinante. No es casual que el mercado nacional de ciberseguridad alcanzara en 2024 los 2.500 millones de euros, un 14,2% más que en 2023.
Por Sergio Martínez, country manager de SonicWall para Iberia
Este crecimiento refleja una tendencia clara: las empresas están invirtiendo más en proteger su negocio, conscientes de que un ataque puede destruir su reputación, su confianza y su continuidad en cuestión de horas.
Los presupuestos en ciberseguridad seguirán aumentando. Se prevé un nuevo incremento del 14% para 2026, lo que situaría el mercado por encima de los 3.000 millones de euros. Según datos del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), en 2024 se gestionaron más de 120.000 incidentes en España, un 20% más que el año anterior. Estas cifras dejan claro que la amenaza es real, y que la protección de los datos —el activo más valioso y, a menudo, irrecuperable— se ha convertido en una prioridad estratégica.
En manos de expertos
La respuesta de las compañías ha sido reforzar sus defensas digitales y adoptar soluciones de protección integral capaces de supervisar, filtrar y bloquear accesos no autorizados. La ciberseguridad moderna ya no se limita a instalar cortafuegos: exige un monitoreo continuo, análisis avanzado y una respuesta inmediata ante cualquier incidente.
Un ejemplo de ello es SonicSentry, que opera bajo el modelo SOC as a Service y ofrece detección avanzada de amenazas con reacción inmediata. Toda compañía experta en seguridad sabe que las primeras 48 horas tras una brecha son críticas. Un enfoque preventivo —con herramientas automatizadas y vigilancia constante— reduce drásticamente la exposición a malware sofisticado, ransomware o amenazas de día cero, garantizando continuidad operativa y resiliencia.
Desafíos para los líderes de TI
Los líderes de tecnología y seguridad se enfrentan hoy a un entorno más complejo que nunca. Su reto no es solo gestionar infraestructuras distribuidas, entornos híbridos y usuarios remotos, sino hacerlo manteniendo la agilidad que los negocios digitales exigen. A ello se suma la escasez de talento especializado, que obliga a las organizaciones a combinar automatización, visibilidad y respuesta rápida sin perder el control.
En este contexto, la colaboración con socios tecnológicos especializados se vuelve esencial. Contar con plataformas capaces de integrar protección, análisis y reacción dentro de un mismo ecosistema permite a las empresas concentrarse en su actividad principal sin sacrificar seguridad.
Tecnologías desafiantes y el papel de la IA
El auge del teletrabajo, el acceso remoto y la adopción masiva de cloud computing y sistemas IoT han ampliado las superficies de ataque. La seguridad ya no puede depender de un perímetro cerrado, sino que debe acompañar al dato allá donde esté. Soluciones como Cloud Secure Edge —procedente de la adquisición de Banyan Security— permiten que los colaboradores se conecten desde cualquier lugar con total seguridad, accediendo únicamente a los recursos necesarios y reduciendo la exposición de los activos corporativos.
A este escenario se suma la inteligencia artificial generativa, que representa un desafío doble: puede ser utilizada tanto para automatizar ataques como para fortalecer las defensas. En SonicWall aplicamos la IA bajo un enfoque responsable, combinando aprendizaje automático y supervisión humana para la detección temprana de amenazas, la correlación de eventos y el análisis predictivo. Además, aplicamos mecanismos de validación continua que aseguran un uso ético y seguro de estas herramientas, minimizando riesgos de sesgo, exposición de datos o decisiones automatizadas no deseadas.
Seguridad desde el diseño y cultura Zero Trust
La ciberseguridad moderna debe entenderse desde el diseño (security by design). Ya no es un añadido posterior, sino una parte esencial del desarrollo tecnológico. Este principio se materializa en el modelo Zero Trust, una estrategia que asume que ninguna identidad o dispositivo es completamente confiable hasta que se demuestre lo contrario. Mediante controles de acceso granulares, verificación continua y segmentación inteligente, el enfoque Zero Trust minimiza el impacto de cualquier amenaza y asegura la continuidad incluso en entornos distribuidos y altamente conectados.
Adoptar este modelo no es solo una cuestión técnica, sino también cultural: implica educar a los empleados, establecer políticas claras y promover una mentalidad de seguridad compartida. Las empresas que integran la ciberseguridad en su ADN organizativo logran una mayor resiliencia y capacidad de adaptación ante incidentes.
¿Freno o impulso para la innovación?
Existe una percepción errónea de que invertir en ciberseguridad puede frenar la innovación. Desde nuestra experiencia, sostenemos lo contrario: la seguridad habilita la innovación. Ningún entorno digital puede crecer de manera sostenible sin estar protegido. La confianza —base de cualquier avance tecnológico— nace precisamente de la seguridad.
Implementar arquitecturas resilientes, procesos auditables y sistemas de detección avanzada no limita la creatividad empresarial; al contrario, la libera, al permitir que las organizaciones exploren nuevos modelos de negocio, adopten tecnologías emergentes y operen con confianza en entornos digitales globales. La ciberseguridad no debe verse como un coste, sino como una inversión estratégica que protege el presente y construye el futuro de las compañías.
El futuro de la protección digital
La transformación digital no se detiene, y tampoco lo hacen las amenazas. En este contexto, el monitoreo continuo, la capacidad de respuesta en tiempo real y la colaboración con expertos son pilares fundamentales. La ciberseguridad, bien implementada, se convierte en el motor silencioso que impulsa la competitividad global.
En SonicWall trabajamos para que las organizaciones puedan mirar al futuro con confianza, sabiendo que su seguridad está en buenas manos. La tecnología, la innovación y la vigilancia constante conforman la base de una defensa que no solo protege, sino que permite avanzar sin miedo hacia un mundo cada vez más digital.