El Brexit, las elecciones de EE.UU... Cómo el Big Data puede 'cambiar el mundo'

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El escándalo que está haciendo temblar a Facebook ha puesto aún más de relieve la importancia de los datos y la influencia que tiene el Big Data en las decisiones de los usuarios. Esto está preocupando, y mucho, a Gobiernos de todo el mundo que están poniendo en marcha investigaciones para conocer qué es lo que ha ocurrido en el caso de Cambridge Analytica y si se han utilizado técnicas ilegales en procesos como el Brexit.

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Las elecciones presidenciales de Estados Unidos, el referéndum sobre el Brexit, las elecciones francesas, las alemanas o las holandesas, o las autonómicas de Cataluña. Éstos son sólo algunos acontecimientos que han estado bajo sospecha ante la posible influencia de agentes externos, como puede ser de terceros países o de intereses de propios partidos.

El último escándalo en este sentido tiene a Facebook como protagonista. Esta semana se ha sabido que la empresa Cambridge Analytica, una compañía británica que ayuda a los partidos políticos a dirigirse a los votantes con mensajes específicos, basados en la información obtenida de la minería y el análisis de datos, había accedido a la información de más de 50 millones de usuarios de Facebook y habría utilizado el Big Data para tratar de influir en su decisión de voto en las elecciones presidenciales de Estados Unidos en favor de Donald Trump (Robert Merce, multimillonario que está detrás de la firma de análisis mantiene una estrecha relación con Steve Bannon, consejero de Donald Trump en la Casa Blanca).

Esto ha hecho que el Parlamento del Reino Unido haya llamado a declarar a Mark Zuckerberg, CEO de Facebook, para aclarar el papel que ha tenido Cambridge Analytica en los procesos electorales, con el referéndum sobre su salida de la Unión Europea en mente. El Gobierno de Theresa May ha mostrado su “preocupación” tras la publicación de un vídeo en el que se ve a Alexander Nix, ex director ejecutivo de Cambridge Analytica, explicar el uso de técnicas para interferir en los procesos electorales. Ente ellas se encuentran, además de tratar de involucrar (aunque no sea cierto) a políticos en escándalos sexuales, el uso de noticias falsas.

 

Y en este punto llega el miedo de los partidarios de la permanencia en la UE sobre la legitimidad del Brexit. En este sentido, Stephen Kinnock, diputado laborista, ha asegurado que “si se demuestra que Cambridge Analytica ha violado nuestras leyes electorales pone en entredicho el resultado del referéndum de la UE”.

Alexander Nix niega haber tenido que ver con la campaña que promovió el Brexit, mientras que Andy Wigmore, director de estrategia de Leave.eu, ha reconocido a The Observer que la firma de análisis ayudó en la campaña dirigiendo “mensajes contra la UE” a los usuarios de Facebook. El nombre de Robert Merce vuelve a ser clave, más por su reconocida amistad con Nigel Farage, uno de los principales promotores del Brexit.

No es nuevo el hecho de que partidos políticos contratan empresas que les ayuden a transmitir sus mensajes en redes sociales, buscando aquel perfil de votante que más se adecúe con sus ideas. El problema es el consentimiento. En el caso de Facebook, y es por esto por el que se enfrenta a multas millonarias y por lo que su valor en bolsa ha caído un 12% desde el pasado viernes hasta el martes, es que podría haber violado su propia política de privacidad.

La red social asegura que en 2015 ya tomó medidas contra la aplicación que accedió a los datos de 50 millones de personas sin consentimiento, y recuerda que no ha sufrido una brecha de datos. Aún así, Mark Zuckerberg va a tener que dar explicaciones ante la FTC (Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos) y el Parlamento británico, quienes, además, investigarán cómo se aplican las políticas de privacidad para proteger los datos de los usuarios con los desarrolladores de aplicaciones.

Lo que ya parece claro es que las redes sociales fueron determinantes en dos de las victorias que nadie vaticinaba: el Brexit y la elección de Donald Trump. Ahora se quiere conocer si las técnicas empleadas fueron ilegales.