El 83% de los ejecutivos prioriza la inversión en IA y automatización para 2026
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Mientras el 95% de los CEO se muestra confiado en la evolución económica, el 84% prevé una mejora de las condiciones globales. La disciplina en el control de costes, el impulso de la inteligencia artificial y la adopción del trabajo flexible se perfilan como las palancas clave para sostener el crecimiento.
El informe State of the C-Suite 2026, elaborado por International Workplace Group (IWG), revela que los líderes empresariales encaran el nuevo año con una confianza renovada. Tras un 2025 marcado por la volatilidad y la cautela, el 95% de los CEO se declara optimista respecto a 2026 y el 84% espera una mejora de las condiciones económicas globales.
Este optimismo no significa complacencia: los directivos apuestan por una ejecución clara y disciplinada, con el control de costes como eje central de sus estrategias. El estudio señala que los CFO están recortando presupuestos en un promedio del 10%, en línea con la necesidad de reforzar la eficiencia operativa y liberar recursos para nuevas inversiones.
La inteligencia artificial como motor de eficiencia
Para alcanzar estos objetivos, los líderes están recurriendo a la inteligencia artificial, capaz de reducir costes operativos entre un 20% y un 40%. Además del ahorro de costes, cuatro quintas partes de los ejecutivos del C-Suite (83%) afirman que la inversión en IA/automatización y en productividad será una prioridad en 2026.
La IA puede generar asimismo mejoras significativas en la productividad. Investigaciones previas de IWG revelaron que el 78% de los empleados afirma que la IA les ahorra tiempo, con un promedio de 55 minutos ganados por día, lo que equivale prácticamente a un día completo adicional de productividad por semana.
Junto a la IA, el trabajo flexible se consolida como otra palanca estratégica, ya que puede disminuir los costes inmobiliarios hasta en un 55%, al tiempo que mejora la satisfacción y retención de los empleados. El 83% de los CEO ya permite a sus equipos operar desde múltiples ubicaciones, combinando espacios locales, oficinas centrales y el hogar.
El 2026 se perfila como el año del trabajo desde una oficina, y no de la oficina. Las motivaciones principales incluyen reducir desplazamientos (43%), acceder a mayor talento (37%), aumentar la satisfacción y adaptarse a las preferencias de los empleados (37%), mejorar la productividad (37%) y aprovechar espacios de coworking con costes más bajos (37%).
