Solo una quinta parte de las empresas está preparada para las disrupciones de la cadena de suministro global

  • Estrategias digitales

Las alteraciones de las cadenas de suministro en todo el mundo se han convertido en un serio problema para la economía y las empresas. De hecho, menos del 20% se siente preparada para hacer frente a los cambios e interrupciones. De ahí que sea necesario invertir en este ámbito para, así, hacer frente a la demanda. El camino, para el Instituto de Investigación de Capgemini, es avanzar hacia una cadena inteligente.

  Recomendados....

» Webinar tendencias tecnológicas 2023 (gestión digital, ciberseguridad, talento...) Registro
» Work from anywhere, garantía de perímetro de acceso seguro Leer
» Customer Data Platform, conocimiento integrado del cliente.
 (G. Castelao, Ibexa)
  
 
Entrevista

Tres cuartas partes de las organizaciones se han visto afectadas en los últimos tres años por el cierre de instalaciones, las alteraciones en la cadena de suministro, el absentismo laboral y el trabajo remoto, y menos del 20% de las compañías se siente preparada para hacer frente a los impactos de estos cambios, según un informe del Instituto de Investigación de Capgemini.

En lo que respecta a las cadenas de suministro, una mayor atención en la sostenibilidad, los cambios socioeconómicos globales y las cambiantes demandas de los consumidores, han hecho que se enfrenten a alteraciones importantes. En este contexto, las preocupaciones más acuciantes de los directivos son la reducción de las emisiones de CO2 en todos los niveles de la cadena de suministro (95%) y el aumento de los volúmenes de comercio electrónico (90%). Alrededor del 92% de las organizaciones encuestadas afirma que la actual reestructuración de la cadena de suministro mundial le afectará, aunque solo el 15% reconoce estar preparada para afrontarla.

Revertir la situación pasa por invertir en cadenas de suministro inteligentes, cuyos ingredientes clave son, según Capgemini, una experiencia del cliente optimizada, sostenibilidad, conectividad global y resiliencia, que permiten obtener pronósticos inteligentes, un diseño de red sólido, una planificación empresarial integrada, una capacidad predictiva y conocimientos oportunos. De esta forma, podrán satisfacer de satisfacer las demandas futuras. De media, en los próximos tres años, las organizaciones prevén aumentar su inversión en la transformación de la cadena de suministro en un 17% y esperan duplicar sus resultados de negocio en términos de crecimiento, rentabilidad y sostenibilidad.

Además, destaca la necesidad de que las organizaciones diseñen redes resilientes y conectadas con una planificación integrada basada en datos. Por ello, sugiere que la tecnología será un factor clave en este sentido, ofreciendo a las organizaciones acceso a información en tiempo real que, a su vez, puede mejorar su capacidad de predecir el cambio y ayudarles a planificar posibles escenarios futuros.

Las compañías expertas de la cadena de suministro (aquellas que han demostrado la capacidad de equilibrar con éxito las múltiples demandas de su cadena de suministro) ya están obteniendo beneficios empresariales. De acuerdo con los datos del estudio, un pequeño grupo de encuestados (9,5%) registró un aumento del 15% en sus ingresos, una reducción del 17% en las emisiones de CO2 y una cuota de mercado de 1,8 puntos porcentuales superior a la de los demás.

Reducir las emisiones
Actualmente, las cadenas de suministro representan más del 90% de las emisiones de gases de efecto invernadero de una organización. Por este motivo, las empresas están reformulando, cada vez más, sus estrategias empresariales para dar prioridad a la sostenibilidad; y muchas están estableciendo objetivos principales para mejorar el impacto medioambiental global de sus productos y servicios. Existe una clara necesidad de que las cadenas de suministro estén en el centro de estas iniciativas de sostenibilidad.

La gran mayoría de las organizaciones encuestadas (95%) reconoce la necesidad de reducir las emisiones de CO2 en toda la cadena de suministro, pero solo el 13% se siente preparada para afrontar estos cambios. Actualmente, la reducción de las emisiones de alcance 1 (causados directamente por la propia organización, encabeza las iniciativas de sostenibilidad (38%), frente a las emisiones de alcance 2 (emisiones indirectas resultantes del consumo energético de una compañía) y 3 (emisiones indirectas causadas por su cadena de valor), que representan el 22% y el 27%, respectivamente. El informe también sugiere que se deben adoptar prácticas sostenibles en toda la cadena de valor, con parámetros transparentes para medir los resultados y sistemas de seguimiento en tiempo real. Invertir en iniciativas de formación y educación de los proveedores ayudará a capacitar a los stakeholders para que tengan un impacto real y permitan que las organizaciones alcancen sus objetivos de sostenibilidad.

El estudio revela que sólo una de cada cuatro empresas ha comenzado a escalar las iniciativas de sostenibilidad en sus cadenas de suministro, lo que pone de manifiesto su interés por mejorar.

Automatización y tecnología de gestión
El informe indica que, cuando las organizaciones planifiquen un aumento de sus inversiones en la transformación de la cadena de suministro, prestarán especial atención a la gestión del cambio y la mejora de las competencias de los stakeholders. También será importante mejorar la colaboración con los actores del ecosistema (clientes, proveedores, homólogos), así como invertir en automatización y robotización para mejorar la eficiencia operativa y redistribuir los recursos (como las interacciones con los clientes, el análisis, la planificación dinámica y la toma de decisiones).

La creación de una arquitectura componible, integrada y centrada en el cliente permitirá a las organizaciones responder con rapidez y mitigar los riesgos de suministro o cumplimiento. Esto supone la combinación de una base transaccional con las mejores prácticas del sector para su implementación, así como plataformas de colaboración e intercambio de datos que eliminan los silos y permiten una gestión integral de la cadena de suministro. Así, la integración de los sistemas de gestión de la cadena de suministro existentes, que de otro modo estarían aislados, permitirá a las organizaciones recopilar, analizar y reaccionar ante el enorme volumen de datos internos y externos que produce una red. Según el estudio, los expertos en materia de cadena de suministro se distinguen de los demás por la rapidez y precisión con la que completan este proceso de agregar, analizar y actuar sobre los datos. Aquellos que adoptan un enfoque de "torre de control" centralizado, donde los datos se cotejan en un cuadro de mandos cohesionado y conectado, ayudarán a romper los silos dentro de la red de la cadena de suministro para proporcionar una visibilidad integral que permita una gestión armonizada.