Los actores de amenazas detrás de GreyEnergy han intentado mantenerse bajo el radar, concentrándose en el espionaje y el reconocimiento, posiblemente en la preparación de futuros ataques de cibersabotaje o preparando el terreno para una operación dirigida por otro grupo.
Más del 40% de los ordenadores ICS fueron atacados al menos una vez en la primera mitad de año, siendo Vietnam, Argelia y Sri Lanka los países más atacados, mientras que la región más segura para las máquinas industriales fue Dinamarca. Internet es la principal fuente de infección.
El aumento de los dispositivos conectados en el ámbito de los controles industriales crea numerosos puntos de acceso para ataques cada vez más sofisticados. Se necesitan soluciones que mejoren la convergencia de las tecnologías TO y TI, para luchar contra las amenazas a infraestructuras críticas.
Entre los sectores que podrían estar menos preparados para un ataque destaca el de atención médica, seguido por los sectores de desechos y aguas residuales, y el de la energía. Los ataques de malware afectaron al 59% de los profesionales de seguridad TI, y el 32% se vieron afectados por ransomware.
Los incidentes de ciberseguridad y los ataques dirigidos experimentados los últimos años, junto con las iniciativas regulatorias, justifican que las compañías de energía comiencen a adoptar productos y medidas de ciberseguridad para sus sistemas de tecnología operativa (OT).
A pesar del aumento en el nivel de amenazas, el 85% de las organizaciones del sector aseguran no contar con un sólido programa de respuesta a incidentes que incluya pruebas regulares de escenarios de crisis. El 44% identifica las restricciones presupuestarias como una barrera clave para responder a los ciberataques.