La inteligencia artificial transformará las finanzas en 2026
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Sage augura un panorama en el que la IA no solo automatiza tareas, sino que redefine la estructura de confianza en las finanzas. Los próximos meses serán claves para que las organizaciones adapten sus sistemas, formen a sus equipos y abracen un modelo en el que humanos y agentes inteligentes trabajen codo con codo.
El sector financiero se encuentra en plena revolución. La irrupción de la inteligencia artificial (IA) está obligando a empresas, reguladores y directivos a replantearse conceptos clave como la confianza, la trazabilidad de los datos y el liderazgo tecnológico. Aaron Harris, director de tecnología (CTO) de Sage, ha compartido su visión sobre las tendencias que marcarán el próximo año y que, según él, redefinirán la profesión contable y financiera.
Los directores financieros, guardianes de la fiabilidad de la IA
La IA ya participa en la planificación, atención al cliente y toma de decisiones financieras. Sin embargo, Harris advierte que los directores financieros deberán asumir un rol central en garantizar que los modelos sean fiables y auditables. “En finanzas, casi correcto es incorrecto”, subraya. La trazabilidad y la transparencia de los algoritmos se convertirán en requisitos indispensables para que los equipos confíen en las recomendaciones automatizadas.
SaaS para la era de los agentes inteligentes
El software como servicio (SaaS) entra en una nueva etapa. Los sistemas financieros ya no estarán diseñados solo para humanos, sino también para agentes inteligentes capaces de ejecutar procesos completos. Esto permitirá reducir errores y acelerar tareas rutinarias, liberando a los profesionales para centrarse en la toma de decisiones estratégicas. “Los sistemas dejan de ser herramientas y pasan a ser compañeros de equipo”, explica Harris.
La confianza pasa de la teoría a la prueba
La confianza en la IA dejará de ser un principio abstracto para convertirse en un estándar verificable. En 2026 se espera la expansión de servicios de “garantía de la IA” ofrecidos por grandes firmas de auditoría como PwC y KPMG, que evaluarán la integridad de los datos y la gobernanza de los modelos. La transparencia será tan exigente como la de una hoja de cálculo: cada recomendación deberá poder auditarse y explicarse.
El auge del auténtico Internet
Con un volumen creciente de contenidos sintéticos generados por IA, distinguir lo fiable de lo dudoso será un reto. Harris anticipa la adopción de marcos de procedencia digital —firmas criptográficas, metadatos seguros y estándares abiertos— que certifiquen el origen y la manipulación de la información. Para los departamentos financieros, conocer la procedencia de los datos será tan importante como los datos mismos.
El CTO, nuevo protagonista en las empresas de contabilidad
La figura del CTO se convertirá en el perfil más codiciado dentro de las firmas financieras. Su papel pasará de apoyar al negocio a darle forma, liderando la integración de sistemas inteligentes y garantizando su comportamiento ético y eficiente. “El liderazgo tecnológico será la clave para destacar en una profesión que evoluciona rápidamente”, afirma Harris. Las empresas que inviertan en estas capacidades estarán mejor posicionadas para ofrecer asesoría de calidad y responder con agilidad a sus clientes.