La nube será más soberana, híbrida y predecible en 2026
- IT Trends
La repatriación parcial de cargas de trabajo desde la nube pública hacia modelos privados e híbridos marcará las estrategias de TI y seguridad. Regulaciones europeas, riesgos de dependencia tecnológica, necesidad de personalización y control del gasto impulsan un enfoque más maduro del cloud, según ReeVo.
El mercado cloud entra en una nueva etapa de madurez. ReeVo Cloud & Cyber Security identifica la repatriación de cargas de trabajo como una de las tendencias clave que definirán las estrategias de TI en 2026. Lejos de ser un retroceso, este movimiento refleja la necesidad de equilibrar flexibilidad, control, cumplimiento normativo y previsibilidad de costes en un entorno cada vez más regulado y competitivo.
Durante los últimos años, la nube pública se consolidó como la vía preferente para modernizar infraestructuras y acelerar la innovación. Sin embargo, el nuevo contexto geopolítico y regulatorio está llevando a muchas organizaciones a redistribuir sus cargas entre entornos públicos, privados y on-premise. Según el Private Cloud Outlook 2025 Report, el 53% de los responsables de TI considera que la nube privada será prioritaria para desplegar nuevas cargas en los próximos tres años, y un 69% está valorando procesos de repatriación.
Hoja de ruta para 2026
La Unión Europea ha reforzado su apuesta por la soberanía tecnológica y la protección de datos con normativas como GDPR, NIS2, DORA, Data Act y AI Act. A ello se suman marcos internacionales como el Cloud Act de EE.UU., que han incrementado la sensibilidad de las empresas sobre jurisdicción y localización del dato. En consecuencia, crece la demanda de entornos europeos con certificaciones y garantías claras de residencia y control, especialmente en proyectos vinculados a GenAI y modelos LLM, donde la trazabilidad es crítica.
La dependencia de estándares cerrados y plataformas propietarias es otro factor que impulsa la repatriación. En 2026, las arquitecturas que favorezcan la portabilidad y la interoperabilidad ganarán protagonismo, permitiendo a las empresas evitar el riesgo de quedar atrapadas en soluciones limitadas y asegurar mayor libertad tecnológica a futuro.
Sara Trappetti, product marketing EMEA de CloudNative DevOps en ReeVo, subraya que “la repatriación no es una alarma, sino una señal clara de que las empresas buscan soluciones más próximas a sus necesidades de negocio. En 2026 veremos un cloud más inteligente y selectivo, pues no se trata de renunciar a sus ventajas, sino de recuperar control, reducir riesgo y alinear tecnología y negocio”.
Por otro lado, el enfoque estandarizado de la nube pública puede limitar la capacidad de adaptación a necesidades específicas. Por ello, la demanda de servicios personalizados y soporte cercano seguirá creciendo, especialmente en sectores regulados y entornos críticos. ReeVo responde con un modelo que permite asignar recursos de forma granular, evitando sobredimensionamientos, y con soporte especializado 24/7/365 en idioma local.
La compañía se posiciona como aliado estratégico para avanzar hacia un cloud más maduro y selectivo, con una propuesta que combina Private Cloud e Hybrid Cloud para integrar flexibilidad con control operativo y económico; soberanía del dato con garantías europeas de localización y cumplimiento; Cloud Native con SIGHUP Distribution para mejorar portabilidad y reducir dependencias; asignación granular de recursos para optimizar costes; servicios gestionados y soporte especializado con cobertura continua; y transparencia económica y modelos orientados a la previsibilidad.
Con este enfoque, ReeVo ayuda a empresas y partners a diseñar estrategias de modernización que integren seguridad por diseño, cumplimiento y flexibilidad. La repatriación se entiende así como una evolución natural hacia modelos más seguros, sostenibles y gobernables, en un entorno donde la nube híbrida y soberana será protagonista.