El 85% de las empresas iniciará la implementación de Windows 10 para finales de año

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Las razones que están impulsando esta migración son, para el 49% de los encuestados, las mejoras de seguridad; mientras que, para el 38%, lo son sus capacidades de integración en la nube.

Según una encuesta realizada por Gartner a más de mil profesionales de TI de Estados Unidos, Reino Unido, Francia, China, India y Brasil, la migración a Windows 10 será más rápida que la adopción previa del sistema operativo. De hecho, el estudio muestra que el 85% de las empresas habrán iniciado su despliegue para fines de 2017.

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En palabras de Ranjit Atwal, director de investigación de Gartner, “las organizaciones reconocen la necesidad de pasarse a Windows 10, y el tiempo total para evaluarlo e implementarlo se ha reducido de 23 a 21 meses entre las encuestas realizadas por Gartner durante 2015 y 2016”, explica. Asimismo, continúa, “las grandes empresas ya están comprometidas con las actualizaciones de Windows 10 o han retrasado la actualización hasta 2018. Esto probablemente refleje la transición de aplicaciones heredadas a Windows 10 o su reemplazo antes de que se realice la migración a Windows 10”.

Las razones que están impulsando esta migración son, para el 49% de los encuestados, las mejoras de seguridad; mientras que, para el 38%, lo son sus capacidades de integración en la nube. Sin embargo, la aprobación presupuestaria no es sencilla. “Windows 10 no es percibido como un proyecto inmediato crítico para el negocio. No es de extrañar, por tanto, que uno de cada cuatro encuestados espere tener problemas con el presupuesto”, puntualiza Atwal.

Para terminar, Meike Escherich, analista de Gartner, apunta que “las intenciones de compra de los entrevistados han aumentado significativamente a medida que las organizaciones vieron productos de tercera y cuarta generación optimizados para Windows 10 con una vida útil de la batería más larga, pantallas táctiles y otras características. La intención de comprar portátiles convertibles aumentó a medida que las organizaciones pasaban de las fases de pruebas y piloto a las de compra y despliegue”, matiza.