¿Por qué las soluciones PaaS marcarán 2022?

  • Opinión

Antonio Pizarro, OVHcloud

Tras el impacto sufrido estos dos últimos años por la COVID-19, las empresas se han visto obligadas a acelerar sus procesos de transformación digital, entre los que destaca la transferencia de sus sistemas críticos a cloud, tendencia que sin duda irá en aumento durante 2022.

Ante este escenario, sumado al auge de las plataformas digitales, el mayor uso de aplicaciones basadas en datos y en analítica y la llegada de la tecnología 5G, no cabe duda de que las organizaciones necesitan más que nunca beneficiarse todas las ventajas que les ofrece la nube, entre las que destacan la capacidad para proporcionar recursos de TI escalables y bajo demanda, así como un enfoque de pago por uso.

Es en este contexto en el que se explica el crecimiento del gasto en servicios cloud: según IDC, el gasto en servicios cloud a nivel global superó ya los 530 000 millones de dólares a finales de 2021. Y Europa sigue está tendencia: el mercado del cloud computing (abarca a las empresas que se dedican a la implementación de la nube, el software, las inversiones en infraestructura y los servicios relacionados con la nube) europeo crece un 27% anualmente, y KPMG estima que seguirá creciendo con fuerza en la próxima década, alcanzando un valor de entre 300 000 y 500 000 millones de euros para 2027-2030.

En este sentido, se espera que el gasto en servicios fundamentales en la nube (especialmente IaaS y PaaS) siga creciendo a un ritmo más alto que el mercado cloud en general, ya que la resiliencia, la flexibilidad y la agilidad guían las decisiones de las plataformas de TI. Concretamente, el mercado de PaaS es el que mayores índices de crecimiento obtendrá, impulsado por factores clave como la creciente necesidad de las empresas de reducir el «time to market» y el coste del desarrollo de aplicaciones, así como de incrementar la agilidad corporativa.

 

¿Qué es PaaS?

En una economía digital, las aplicaciones son el producto que se comercializa o bien la herramienta de producción. Para ser competitivos, debemos ser capaces de crear, mantener, mejorar y escalar estas aplicaciones respetando las exigencias de nuestra actividad.

PaaS o Platform as a Service es una evolución de los usos del cloud que proporciona al usuario una plataforma lista para usarse en la que poder instalar, configurar y ejecutar sus propias aplicaciones. La plataforma se aloja en las infraestructuras del proveedor y este proveedor de servicios es quien administra el hardware, la capa de virtualización y el sistema operativo.

Este modelo permite un aumento de la productividad en las empresas, ya que pueden proporcionar a sus equipos (y en particular, a sus desarrolladores y programadores) una plataforma para ayudarles a desarrollar su trabajo diario, sin tener que encargarse del mantenimiento, lo que les permite concentrarse en optimizar la gestión de las aplicaciones.

 

¿Cuáles son las ventajas de migrar a PaaS?

PaaS permite que las empresas y los desarrolladores puedan aprovechar todos los beneficios del cloud a mayor escala: desde la seguridad y confiabilidad, a la alta disponibilidad de recursos bajo demanda, la optimización de costes o la escalabilidad, incluyendo la asignación y designación rápidas de recursos con un modelo de pago por uso.

Además, los sistemas PaaS generalmente permiten compartir recursos entre múltiples equipos de desarrollo, evitando la necesidad de una asignación excesiva de múltiples activos del mismo tipo en silos separados.

Estos sistemas PaaS se pueden, asimismo, utilizarse para crear aplicaciones que luego se ofrecen a otros clientes y usuarios como una oferta de software como servicio (SaaS). Los requisitos de las aplicaciones SaaS, incluida la escalabilidad y la capacidad de manejar múltiples inquilinos, generalmente se pueden cumplir con las capacidades de computación en la nube de un sistema PaaS.

Por último, pero no menos importante, una excelente solución PaaS debe abordar los desafíos de la nube para ofrecer lo mejor de los mundos IaaS y PaaS, con funcionalidades como:

-    Servicio bajo demanda con un acceso y aprovisionamiento instantáneo, totalmente automatizado.

-     Diferentes modelos de despliegue (public, private y hybrid cloud).

-     Combinación perfecta de bloques de tecnología IaaS y PaaS (cómputo, almacenamiento, bases de datos).

-     Interoperabilidad y no bloqueo, con estándares que permitan los despliegues multicloud.

-     Compatibilidad con cargas de trabajo nuevas y heredadas.

 

En definitiva, las soluciones PaaS se erigen como una de las áreas de servicios de cloud que más rápido crecimiento tendrá en 2022 debido, fundamentalmente, a que las organizaciones demandan un servicio cada vez más adaptado a sus necesidades y que les permita olvidarse del mantenimiento y concentrarse en sus aplicaciones y datos empresariales, con objetivo de aumentar su ventaja competitiva.

 

Antonio Pizarro, sales director, Southern Europe and Brazil, OVHcloud