Un Black Friday marcado por la pandemia pondrá a prueba el comercio online

  • Actualidad

Las tiendas online afrontarán un Black Friday en el que se juegan mucho en plena segunda ola de coronavirus. Para superar con éxito esta campaña, puede no ser suficiente con estar en Internet. Las empresas deben ofrecer una experiencia de compra sencilla y cómoda, pero también ser capaz de responder a la demanda de información y servicio por parte del consumidor.

Recomendados

El dato: piedra angular de una experiencia customer-centric Webinar

La era de la experiencia de cliente sin contacto Leer

Diario de un vendedor de tecnología Leer

Para superar con éxito este Black Friday, “la anticipación, la satisfacción de las necesidades y expectativas de los usuarios su core de negocio”, según los expertos de PaynoPain, empresa tecnológica española especializada en herramientas de pagos online.

Aún reconociendo que los consumidores van a tener una mayor predisposición a comprar online, la firma cree que las tiendas online van a tener que adaptarse a las expectativas del cliente.

Para PaynoPain, esto significa tener capacidad para resolver sus dudas al momento para no perder oportunidades de ventas, al mismo tiempo que se ofrece un servicio flexible que facilita todo el proceso de compra. A modo de recomendaciones, resume en cuatro puntos los aspectos que los comercios deben tener en cuenta a la hora de prepararse para esta campaña:

- Estar actualizado en tiempo real. La pandemia ha cambiado radicalmente la forma en que los consumidores compran. Esto significa que no sólo adquiere productos por el canal online sino que, además, utiliza Internet para buscar ofertas y verificar el stock de una tienda como paso previo a desplazarse hasta el establecimiento. Esto exige tener actualizado al segundo el stock de los productos de la tienda online con el objetivo de satisfacer la necesidad de información del usuario, que favorezca su conversión en el comercio físico.

- Disponer de la flexibilidad para dar respuesta a un incremento de clientes. A diferencia de las tiendas físicas, las virtuales no tiene límites de aforo sin embargo, un pico súbito en las visitas a la web puede derivar en una caída del site y, en consecuencia, frustrar las oportunidades de venta. Por este motivo, es importante contar con la flexibilidad necesaria para adecuar la capacidad de respuesta de nuestra página a la demanda real.

- Ser versátil en la forma de pago. Abonar la compra es un momento crítico del proceso. Hacerlo sencillo y cómodo para el usuario es vital para la conversión. En este sentido, es recomendable integrar el proceso de pago dentro de la propia web y ofrecer el mayor número de métodos de pago. Cuanto más posibilidades de pago tenga el usuario a su disposición, más oportunidades habrá de que éste encuentre aquel que más se ajusta a sus necesidades o preferencias y concluya la compra.

- Garantizar la seguridad. La seguridad a la hora de pagar ha sido, históricamente, el mayor freno a crecimiento del ecommerce, aunque muchos han superado este obstáculo por la necesidad del momento. Establecer la autenticación de doble factor, como recoge la segunda Directiva Europea de Servicios de Pago o PSD2, que será obligatoria el próximo 1 de enero, es un elemento clave para garantizar la seguridad en los pagos, favoreciendo la conversión y la tasa de repetición.