"Nuestro principal reto es la satisfacción del cliente", María Antonia Rodríguez, Dell Technologies

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María Antonia Rodríguez, directora general de Dell Technologies en España

El pasado mes de febrero se anunciaba un cambio en la dirección general de Dell Technologies en España con la llegada de Maria Antonia Rodríguez que, tras casi 25 años en la compañía, pasaba a liderar el negocio de la firma en nuestro país. De cuáles son sus retos, de cómo puede evolucionar el negocio y de cuál debería ser el rol de su organización en nuestro mercado, hemos hablado con ella, así como de la importancia de las personas en la innovación o del papel cada vez más esencial de la tecnología.

Tras casi 25 años en Dell Technologies, accede ahora a la dirección general, ¿qué aporta esta nueva posición a la visión que tiene de la compañía?

Sobre todo, la visibilidad, que Dell Technologies sea visible en el mercado y lo que yo pueda aportar para que eso ocurra. Desde el punto de vista de negocio, la responsabilidad de seguir aportando. Pero conseguir esa visibilidad creo que es buena tanto para nuestros partners y para nosotros como para nuestros clientes. Cuanta mejor comunicación haya y mejor nos conozcamos, mejor colaboración tendremos.

 

¿Qué otros retos se plantea, tanto a nivel personal como a nivel de compañía?

A nivel personal, el principal reto, y creo que vamos por buen camino, era hacer un cambio con estabilidad, proporcionando confianza, que creo que me lo facilita el hecho de llevar tantos años dentro de la compañía, el ser conocida dentro y fuera. Y creo que vamos por buen camino en el sentido de que así está siendo reconocido tanto por nuestros clientes como por nuestros partners de canal, y por los compañeros. Y desde el punto de vista corporativo, pues el principal reto siempre es conseguir la satisfacción de nuestros clientes y, a través de ello, llegar a los objetivos de negocio.

 

Hablando de negocio, ¿cuáles son esos objetivos para este año?

Los objetivos los tenemos definidos en función de las líneas de negocio. Somos una compañía con una oferta muy clara con capacidades extremo a extremo, y nuestros objetivos están alineados a esas capacidades. Tenemos objetivos tanto en el mundo de producto cliente y dispositivos de usuario final, con todos los servicios de integración y de facilitación alrededor del puesto de trabajo, como las soluciones que tradicionalmente hemos llamado de centro de datos, pero que ya no se quedan solo en el data center, sino que cada vez hay más cómputo y almacenamiento en el Edge. Y nuestros objetivos van en esa línea, en paralelo a las tendencias del mercado, por otra parte.

 

"Desde el punto de vista del negocio de las empresas, estar preparados para competir en un panorama de incertidumbre es el principal reto"

Comparando con otros países, en cada una de esas líneas diferentes de negocio en España, ¿está la compañía en la posición que debería?

Yo siempre seré muy exigente y siempre querré estar mejor que todos los demás. Pero tenemos una participación global clara, conocida en el mercado, y estamos muy alineados a nivel local.

 

¿Cómo ve a Dell Technologies integrada dentro del mercado español?

Pues también muy alineada con la integración a nivel mundial, porque vemos unas tendencias muy claras. Nuestra estrategia como compañía global está definida desde hace mucho tiempo, y la seguimos ejecutando de forma coherente, y esta estrategia también tiene sentido en el mercado local. Vemos las mismas tendencias, porque la infraestructura tecnológica es esencial para el negocio de nuestros clientes. Cada vez es más importante, por no decir que en algunos casos la tecnología es el mismo negocio. Otra de las tendencias que vemos es la relacionada con la experiencia laboral. La innovación viene a través de las personas. Tener motivadas a estas personas y ofrecerles la mejor experiencia de usuario es clave, y la tecnología cada vez es más un factor de atracción y retención de talento. Durante la pandemia hemos visto también una explosión de la utilización de la nube, y hemos identificado que cloud era hablar de nube pública. Es verdad que tuvo una explosión esta nube pública, porque hacía falta inmediatez y flexibilidad. Pero ahora llegamos a un momento de poner un punto de vista racional y definir de qué forma o qué cargas tienen que estar en qué nube. Y ahí tenemos mucho que decir y estamos ayudando a los clientes. Estamos viendo la importancia de la confidencialidad de la información, la predictibilidad de los costes, el valor del rendimiento y la latencia, que en algunos casos puede ser crítico… Con todo, el mundo multicloud es una tendencia clara. Y, además, este año vamos a vivir, ya lo estamos viviendo, la explosión de la inteligencia artificial y todas las oportunidades que hay detrás de ella, y no podemos olvidar que somos el principal fabricante de servidores en el mundo. Por último, la seguridad. Estamos ayudando a nuestros clientes para que estén preparados en su ciber-resiliencia, porque es absolutamente clave y crítico. A lo mejor la prevención está siendo menos relevante, pero no la parte de detección temprana de alertas, de que haya algo anormal dentro de la infraestructura, o la capacidad de estar preparados para, en caso de ataque, saber cuál es el mecanismo de recuperación y qué es lo que tengo que hacer para que mi negocio siga siendo viable. Es una conversación que tenemos a diario con los clientes.

 

Comentaba que la innovación va de la mano de las personas. ¿Es una idea que ha calado en los clientes o siguen poniendo la tecnología en primer plano?

La verdad es que es una conversación interesante. Cuando hablamos con los clientes, llega un momento en el que en la decisión sobre los dispositivos de usuario final está interviniendo el departamento de Recursos Humanos. Realmente existe un interés y una competencia por el talento brutal. Hay determinados perfiles que están muy demandados en el mercado. Y la tecnología es un factor de atracción y de retención. Y no sólo la tecnología del dispositivo, sino la experiencia del usuario. Por ejemplo, tener la libertad para poder trabajar en cualquier sitio.

 

Ese problema de talento se ve claramente en el mercado, ¿qué pueden hacer las compañías de tecnología como la suya para ayudar a resolverlo?

Déjame que mire a mi propia compañía y a la aportación de las personas. En Dell Technologies tenemos grupos de empleados con temáticas concretas que fomentan, que defienden, que divulgan. Grupos de empleados que, por ejemplo, defienden el trabajo remoto, grupos que promocionan la diversidad, ya sea de género o racial, por ejemplo. Son iniciativas que, a nivel de empleados dentro de Dell Technologies estamos poniendo en marcha como futuros digitales. Concienciar, aportar a la sociedad información, ir a los colegios y explicarles a los estudiantes que la tecnología es el futuro, que la tenemos en todas partes y que es esencial en los trabajos del futuro. Por eso, todas las compañías estamos invirtiendo, y digo estamos porque también somos una compañía que utiliza la tecnología para nuestro negocio. ¿De qué forma podemos aportar? Podemos aportar servicios, podemos ayudar a nuestros clientes con los servicios de lo que no consiguen con la contratación de talento, pero sobre todo en construir ese futuro, en concienciar.

 

Ese es un compromiso con la sociedad y con el mercado que va mucho más allá de aportar tecnología….

Exacto, es un compromiso y tenemos un equipo, de verdad, muy comprometido, y estamos orgullosos.

 

¿Qué retos cree que tiene el mercado español?

Pues desde el punto de vista del negocio de las empresas, estar preparados para competir ante un panorama de incertidumbre. Porque no saben por dónde va a surgir la competencia o cuál va a ser el arma que los competidores actuales o los que a día de hoy todavía no existen y puedan existir mañana, puedan aprovechar. Y, en este sentido, vuelvo a la innovación. Estar preparados para innovar y apoyarse en la tecnología puede apoyar muchísimo, para estar listos no solo para reaccionar sino para anticiparse. Esto es bueno para España, pero la competencia no es solo local, y puede surgir de cualquier parte. Por otra parte, las empresas deben entender cómo conseguir que la información de que disponen sea útil, cómo pueden explotar esos datos y convertirlos en valor para el negocio. Este es el reto principal, pero déjame que lo enlace con la seguridad, porque yo puedo organizar mi plan de negocio, pero me lo pueden distorsionar en cualquier momento los cibercriminales. Debemos estar preparados, ser resilientes. Y, si eso ocurre, o, mejor dicho, cuando ocurra, es esencial reaccionar, porque cuanto antes lo detecte, más minimizaré el impacto y antes podré reaccionar. Que las compañías tengan ese plan de ciber-resiliencia es absolutamente crítico. La seguridad es una amenaza real y seria, y es uno de los criterios de diseño que estamos incorporando dentro de nuestra infraestructura. De hecho, estamos anunciando que Dell Technologies está liderando un consorcio de unas 30 compañías dentro del mundo de la tecnología para abordar esas políticas y esa definición del marco de Zero Trust; ver de qué forma lo incorporamos en nuestros diseños y en nuestras políticas. Es algo absolutamente crítico, y una conversación que estamos teniendo a diario con nuestros clientes.

 

¿La seguridad ha dejado de ser una línea más de negocio para convertirse en el pilar fundamental de cualquier propuesta tecnológica?

Está directamente relacionada con cualquiera de las propuestas tecnológicas. Es una línea de negocio, por supuesto, pero en cualquiera de las propuestas has de tener en cuenta la seguridad. Pero hablamos de seguridad desde un punto de vista muy amplio, de tener características de privacidad en los dispositivos personales, utilizando la IA para potenciar la seguridad; de la protección desde el punto de vista de la integridad, la disponibilidad y la fuga del dato. Todas nuestras soluciones tienen como base la seguridad.

 

"La tecnología y la experiencia de usuario es esencial para obtener y retener talento"

¿Ha salido este mensaje de seguridad del departamento de TI y ha llegado al comité de dirección de las empresas?

Ha llegado al comité de dirección, y en las empresas donde hay consejo de administración, es uno de los temas de conversación.

 

En estos años de la pandemia, ha habido una clara aceleración de la digitalización, pero ¿se ha hecho con la planificación necesaria o hace falta racionalizar lo que se ha hecho para seguir avanzando?

Sinceramente, creo que ha habido una combinación de ambas. La pandemia fue algo imprevisto, con lo cual ha sido una reacción brusca en muchos casos y, afortunadamente, la tecnología ha facilitado esa reacción dar respuesta a los retos de negocio. A partir de ahí, ahora tenemos una gran oportunidad de poner orden. Si hablamos de multicloud, hemos tenido la inmediatez de tener una contratación a cualquier coste, pero ahora tenemos la oportunidad de analizar dónde tiene sentido poner cada una de las cargas, a qué precio, con qué rendimiento, con qué respuesta, con qué predictibilidad, cómo la incorporo o cómo defino una estrategia multi-cloud dentro de mis planes de evolución. Estar utilizando muchas nubes no es una estrategia multicloud, esa es la gran diferencia. Y creo que ya los clientes llevan un tiempo poniendo orden.

 

Sin ese orden ¿la nube podría convertirse en un problema para los clientes?

Totalmente. Hablamos de la nube como un sitio, pero es una forma de conseguir la tecnología, y puedes hacerlo en la nube pública, en tu propia instalación, o puedes tener una combinación. Y es muy importante definir cuál es el modelo financiero de consumo de esa tecnología. Porque si hablamos de modelos de consumo como los de cloud, estamos hablando de modelos flexibles, de pago por uso, de modelos como un servicio… esto es lo que realmente le da la fuerza a los clientes para poder tener ese control de los costes y ese control de su infraestructura, porque están definiendo ellos cuál es su política y cuál es su estrategia a la hora de implementar su futuro y el futuro de su negocio. Es absolutamente clave.

 

Y ahí Dell Technologies no tiene preferencias…

Por supuesto, el cliente siempre decide y es soberano. Nosotros hablamos de modelos financieros, y APEX es nuestro paraguas donde incorporamos todas las soluciones flexibles y de pago por uso, y estas soluciones, al final, lo que facilitan es que la decisión del cliente sea la más acertada en términos de poder combinar lo mejor de distintos mundos. Pero, por supuesto, siempre es el cliente el que toma la decisión más adecuada para su negocio. La gran ventaja que nosotros tenemos es una visión muy amplia de las capacidades de la tecnología y nuestras posiciones de liderazgo en las diferentes líneas tecnológicas y en la infraestructura, que nos permiten compartir con los clientes todas estas posibilidades. El cliente puede elegir y podemos asesorarle sobre qué es lo más adecuado en cada uno de los casos. Y con la potencia de Dell Financial Services, como respaldo de todas nuestras soluciones flexibles, cerramos el círculo.

 

¿Está ya disponible como servicio toda la propuesta tecnológica de Dell para los clientes?

Sigue siendo una propuesta en evolución, porque, gracias a APEX, las soluciones que les estamos proponiendo a los clientes son de verdad flexibles en el sentido de que no siempre son un compromiso creciente. Permitimos subir y bajar los compromisos. Por otra parte, cuando hablamos del coste de utilización de una plataforma, el precio que hemos establecido para el consumo comprometido es el mismo precio que aplicamos a los picos de consumo. Son soluciones que están muy bien construidas y muy bien aceptadas en las distintas tecnologías.

 

¿Qué porcentaje de su cifra de negocio ya proviene de soluciones de pago por consumo?

Realmente reportamos el negocio, no la forma en la que se consume. Nosotros hablamos de cifras de mercado siempre de la mano de consultoras independientes, y no sé si ellos ofrecen una categoría específica de consumo como servicio.

 

Hablando de resultados, está a punto de finalizar su primer trimestre de este año. ¿Qué nos puede comentar al respecto?

Normalmente el primer trimestre del año por estacionalidad es un período distinto del resto, pero puedo contestar con optimismo, porque estamos moviendo el negocio que esperábamos. No podemos dar cifras concretas, pero las estimaciones que tenemos están muy alineadas con las expectativas que teníamos.

 

¿Cómo estiman que será el resto del año?

La tecnología sigue siendo esencial para los negocios. El año pasado tuvimos un mayor crecimiento en todas las soluciones empresariales, y lo que estamos viendo es que esto no cambia.

 

"En la pandemia, la tecnología facilitó dar una respuesta rápida a los retos de negocio, pero ahora tenemos una gran oportunidad para poner orden"

El pasado mes de febrero, la corporación anunció una importante cifra de despidos. ¿Ha tenido algún impacto en España? ¿Cómo va a evolucionar la cifra de empleados en España este año?

Normalmente, como estamos muy cerca de los clientes por nuestro modelo de negocio, anticipamos rápidamente los cambios y el impacto que podamos tener. Y desde junio del año pasado ya empezamos a parar contrataciones. Fue una forma de anticipar. No podemos dar datos por países, porque somos una compañía global, e, incluso, a nivel de geografías podemos tener empleados en España que estén trabajando para otras zonas, con lo cual no es tan significativo.

 

Pero es curioso que estemos hablando siempre de falta de talento y se sigan produciendo despidos en el sector tecnológico…

Realmente fíjate cuántos perfiles nuevos siguen necesitándose y apareciendo día a día. No sabemos lo que nos espera a la vuelta de la esquina y cuáles son los perfiles que en cada momento van a ser más demandados. La flexibilidad y la capacidad de adaptarnos a cada una de las circunstancias es una oportunidad, aunque es verdad que habrá que adaptarse en cuanto a cuáles son los perfiles que se vayan a necesitar.

 

Mucho se habla de la inteligencia artificial, pero ya surgen voces que piden una mayor regulación. ¿Cuál es su apuesta en ese terreno?

Con independencia de cómo se acabe regulando, que algún tipo de regulación tendrá que haber, déjame que te diga que para nosotros es una inmensa oportunidad, porque todo lo que hay detrás de la inteligencia artificial es capacidad de cómputo y somos el principal fabricante de servidores. Es una oportunidad magnífica.

 

Hace casi un año se anunció la venta de VMware a Broadcom, pero ahora tanto la Unión Europea como las autoridades británicas han expresado sus dudas sobre la operación. ¿Puede afectar esto de alguna manera a la venta y a la relación con Dell Technologies?

Tenemos un acuerdo muy interesante con VMware. Es uno de nuestros principales partners tecnológicos y tenemos acuerdos firmados a largo plazo tanto de inversión en I+D conjunto como de comercialización, y lo que seguimos viendo es la oportunidad de comercialización conjunta.