El 60% de las startups españolas se crean por dos o tres emprendedores

  • Actualidad

Lo habitual en España es emprender en equipo, y seis de cada diez startups han sido creados por dos o tres emprendedores. Solo un 6% parte de la iniciativa de uno solo. El ecosistema de empresas emergentes sigue madurando, y alcanzan de media tres años de vida, frente a los dos años y medio de 2020. Seis de cada diez ya están generando ingresos.

South Summit e IE University han dado a conocer una nueva edición del mapa del empredimiento español, que concluye que el ecosistema emprendedor en España está maduro. Las startups locales alcanzan ya los tres años de vida de media, con una evolución positiva respecto a años anteriores (2,7 años de vida media en 2021, 2,5 en 2020 y 2,2 en 2019). Se trata de un promedio ligeramente por debajo de las startups de Norteamérica (3,04 años de vida), Europa (3,19) y Latam (4,47).  Además, siete de cada diez startups ya han lanzado su producto y está generando tracción, casi un 10% más que el pasado año.

Los campos de formación mayoritarios de los emprendedores son la Ingeniería y las Ciencias Sociales. El ecosistema español es cada vez más intensivo en conocimiento y cada vez está más diversificado, no solo en tecnologías, también en sectores. Fintech, Educación y Salud son los ámbitos en los que más hay, seguidas de: desarrollo de software, e-commerce, impacto social, agroTech, data y analítica. Completan el top 10, dos nuevas áreas: servicios de productividad y medios de comunicación.

Otro dato del informe es que tiene un gran potencial de crecimiento en el área de Inteligencia Artificial, que supone un 16,8% de los proyectos, un poco por debajo de la media europea, situada en el 22,4%.

La madurez del ecosistema se mide también por la capacidad de generación de oportunidades laborales: el 69% de los proyectos españoles tiene entre dos y diez empleados, mientras que un 26% (9 puntos porcentuales más que el año pasado) cuenta con entre diez y 50 profesionales en su equipo. Las expectativas de contratación para 2023 son positivas en un entorno económico condicionado por la inflación.

En cuanto al nivel de ingresos, seis de cada diez startups en España ya los están generando, un 11% más que en 2021. El 11% supera los 500.000 euros anuales y un 18% tiene EBITDA positivo, lo que supone seis puntos más que en 2021 y un 5% más que en el resto de Europa. Además, un 32% de las startups espera alcanzar un EBITDA positivo en un año. 

Esta edición del ‘Mapa del Emprendimiento’ pone de relieve que se ha producido un importante cambio de tendencia en las fuentes de financiación. Nos dirigimos, según este análisis, hacia un modelo cada vez más profesional y equilibrado, al pasar los fondos privados de representar el 11% en 2018 al 32% en 2022, mientras que los fondos propios han bajado del 60% al 46% en ese mismo periodo.

Las startups en España no solo buscan más financiación (19%), ganar mayor visibilidad (19%) o lograr acuerdos estratégicos (18%), también demandan en todas las regiones mejoras en fiscalidad para su creación y la atracción de inversores, así como una mayor flexibilidad en contratación.

Así son los emprendedores
Lo más habitual sigue siendo emprender en equipo, normalmente reducido y masculino: el 60% de las startups tiene entre dos y tres fundadores, mientras que un 35% cuenta con más de cuatro. Asimismo, seis de cada diez están fundadas únicamente por hombres y solo un 6%, por mujeres. Las startups con un equipo de fundadores mixto representan el 35%.

En el estudio de este año irrumpe la figura del “solopreneur”, que supone el 6%. Es un emprendedor que crea, lidera y desarrolla su startup en solitario, sin equipo fundador, un ‘autónomo 3.0’. Esta tendencia, originaria de Estados Unidos, surge principalmente en negocios del ámbito digital.

En línea con ediciones anteriores, los emprendedores en serie es también una constante en el ecosistema, con un 62% de ellos que ha fundado más de un proyecto, un 2% más que en 2021, lo que pone de manifiesto cómo el propio ecosistema es una fuente de talento. En mayor medida que los emprendedores noveles, los principales motivos por los que los emprendedores en serie ponen en marcha una startup es porque siempre tuvieron clara la idea de emprender y por haber detectado una oportunidad en el mercado.

La probabilidad de éxito de una startup también aumenta cuanto mayor es la experiencia de sus fundadores. Mientras el porcentaje de venta de un proyecto creado por emprendedores noveles es inferior al 20%, este índice supera el 70% entre aquellos que han creado más de cuatro startups. 

Respecto al retrato robot del emprendedor español, se mantiene estable durante los últimos años. Así, responde mayoritariamente a un hombre (80%), de 33 años, con alta cualificación (la mayoría cuenta con un título universitario, el 70% con un máster y un 16% emprenden con un PHD). Además, son perfiles con una importante experiencia profesional previa: más de la mitad trabajaba en una empresa antes de poner en marcha su startup, un 24% ya contaba con algún proyecto emprendedor y un 7% estaba empleado en una startup. Menos de un 1% se encontraba en paro.

La incorporación de la mujer al ecosistema sigue siendo una asignatura pendiente a nivel global. En España, la mujer emprendedora representa un 20%, ligeramente por encima del conjunto de Europa (17%) y por debajo de Norteamérica (21%) o Latam (24%).