La mayor parte de los líderes empresariales y los empleados no esperan un mundo laboral mejor tras la crisis

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Adecco Group Institute ha realizado una encuesta para conocer la visión que tienen los líderes empresariales y los empleados sobre el futuro del trabajo. De las respuestas de este estudio, realizado en Estados Unidos, Francia, España y Bélgica, se deduce que el 45% de los líderes empresariales encuestados espera un mundo laboral mejor después de la crisis de la COVID-19, en comparación con los trabajadores: solo un 36% de ellos es optimista, y el 41% de ellos opina que, después de la pandemia, el trabajo será peor que antes.

Los recién graduados y con pocos años de experiencia (18-30 años) y los trabajadores de 41 a 50 años, miembros de la Generación X, son los más pesimistas, el 25% de ambos grupos considera que el futuro del trabajo será mucho peor que antes. Los empleados de 31 a 40 años y mayores de 50 creen que el trabajo será mucho mejor que antes en el futuro, así opina el 20% de ambos grupos.

Los resultados sugieren que el trabajo a distancia se va a consolidar una vez superada la pandemia. Eso al menos es lo que creen ocho de cada diez líderes, que esperan que se pueda hacer, aunque solo la mitad de los trabajadores considera que eso pueda llegar a ser una realidad. En el mismo sentido, siete de cada diez ejecutivos confían que será posible contar con horarios más flexibles y adaptados, aunque solo el 51% de los trabajadores encuestados piensa que podrá ser efectiva esa flexibilidad.

Lo que sí creen los trabajadores en mayor medida que los líderes empresariales es que se mantendrán las políticas de apoyo económico a los empleados (42% versus 16% de los directivos).

Los líderes empresariales y los trabajadores abordan las habilidades prioritarias de manera diferente, lo que indica un desajuste entre las habilidades necesarias en el futuro y las que se están desarrollando ahora, aunque hay un importante consenso en relación a las competencias digitales: el 56% de los trabajadores y el 54% de los líderes considera el análisis de datos y el data science, las más importantes.

Aparte de las habilidades tecnológicas, la encuesta también constata que, a medio y largo plazo, el despliegue de tecnología requiere más habilidades interpersonales, como la comunicación, el pensamiento crítico o la creatividad y la originalidad.