Más de la mitad de las empresas españolas utilizarán la nube híbrida en uno o dos años

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Las organizaciones españolas utilizan los centros de datos tradicionales y las clouds privadas más que sus homólogas europeas, pero se producirá una reducción en los próximos 12-24 meses, a favor de un modelo de cloud híbrida.

 Un 91% de los encuestados cree que el modelo de cloud híbrida es el ideal, con la interoperabilidad entre diferentes tipos de nube, la posibilidad de mover las aplicaciones de una nube a otra, el coste optimizado y la seguridad son señalados como los principales beneficios identificados por los participantes en el Enterprise Cloud Index, estudio realizado por Vanson Bourne para Nutanix.

Sobre las empresas españolas, el estudio profundiza en cómo utilizan los entornos cloud y con qué frecuencia. Según sus datos, actualmente realizan más cargas de trabajo en centros de datos tradicionales que las compañías de otros países, pero utilizan la nube privada más a menudo. Además, están utilizando entornos de cloud híbrida de forma más habitual, aunque están por debajo en lo que se refiere al uso de entornos de una única nube privada y entornos de múltiples nubes privadas.

Con respecto a sus planes de futuro, a uno o dos años, planean una constante reducción del uso de los centros de datos y de la nube privada, lo que supondrá el correspondiente incremento del uso de la nube híbrida para alcanzar una penetración del 57%, que sobrepasaría la media de EMEA situada en el 43% y el promedio global, en el 41%.

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A diferencia de empresas de otros países, que consideran la seguridad de los datos, el cumplimiento legislativo y la escalabilidad como los principales beneficios que ofrece la nube pública, los españoles consideran que tener un coste de propiedad más bajo (26%) y un mejor rendimiento (18%) son sus principales ventajas. La seguridad de los datos y el cumplimiento legislativo lo sitúan en tercer lugar (13%), mientras que la escalabilidad es lo que menos preocupa a los españoles (5%).

No obstante, con respecto a los criterios a tener en cuenta a la hora de elegir dónde llevar a cabo las cargas de trabajo, las empresas españolas sí que consideran la seguridad y el cumplimiento normativo como el principal factor (28%) a la hora de elegir dónde ejecutar las cargas de trabajo, al igual que ocurre en EMEA y en otras regiones. El coste se sitúa en segundo lugar (23%), seguido del rendimiento (14%), la agilidad (10%) y la escalabilidad (6%).