Retos que hay que abordar para transformarse con éxito

  • Estrategias digitales

Avanzar hacia modelos de gestión colaborativos y ágiles, conseguir una mayor flexibilidad en la formación o adoptar nuevas políticas de aprovisionamiento son algunos de los desafíos de las empresas que quieren ser competitivas en el entorno actual. Repasamos los retos empresariales que se deben acometer si quieren que la transformación digital no se haga en balde.

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Hay seis grandes desafíos empresariales que las empresas tienen que afrontar si quieren que sus grandes iniciativas de transformación digital lleguen a buen puerto.

Ha reparado en ello la consultora tecnológica Setesca, cuyos expertos dicen que estas acciones “no tienen un gran impacto en la cuenta de resultados si no van acompañados de un modelo de gestión orientado realmente a la búsqueda constante de una mejora de la competitividad”.

A juicio de la firma, en un entorno tan competitivo y cambiante como el actual, las organizaciones deben abordar cambios en gran parte de su cadena de valor y en su gestión interna. Por ejemplo, en este ámbito destaca que se ha pasado de estructuras de decisión muy verticales a modelos más participativos y ágiles. Actualmente, la responsabilidad de la decisión se delega en el grupo.

Esto también exige nuevos perfiles directivos y profesionales, capaces de liderar modelos de trabajo más flexibles, orientados a la innovación y muy centrados en el mercado. La evolución también afecta al ecosistema de proveedores ya que, según Setesca, “los modelos tradicionales de aprovisionamiento en grandes y conocidos proveedores se ven sustituidos por nuevos proveedores más pequeños, más agiles y más económicos”.

También fundamental es acometer cambios en los modelos de aprovisionamiento. La tendencia en este punto es buscar proveedores de mayor proximidad y que puedan garantizar el suministro de materiales para reducir su huella de carbono o los costes logísticos, por ejemplo.

En modelos de negocio, en los que la innovación cobra cada vez un papel más relevante, es necesario también que la formación cambie y se a más flexible para dotar rápidamente a los empleados de las capacidades y el conocimiento que necesitan. Y, por último, las organizaciones tienen que ser conscientes de que el modelo de toma de decisiones está cambiando por completo, tanto en sus herramientas de gestión como, en general, en su cadena de valor. “Las empresas están incorporando modelos de toma de decisión cada vez más basados en analítica de datos avanzada. Además, están planteando cambios en su modelo tradicional de gestión basándose en las nuevas posibilidades que ofrece la tecnología (verticalización de procesos, adopción de modelos colaborativos, digitalización de procesos,...)”, concluye la consultora.