El CIO pasará en 2026 de gestor técnico a estratega corporativo
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La aceleración digital y la irrupción de la inteligencia artificial transforman el rol del CIO, que pasa de gestionar sistemas a liderar la estrategia tecnológica del negocio. Integrar la IA, reforzar la conectividad y garantizar la resiliencia y la seguridad serán las tres prioridades clave del próximo año.
La transformación digital de las organizaciones entra en una nueva fase impulsada por la inteligencia artificial, la necesidad de infraestructuras más robustas y la creciente presión regulatoria. En este escenario, los expertos de fibratel señalan que el papel del CIO está evolucionando rápidamente: de ser un gestor técnico centrado en la estabilidad de los sistemas, pasa a convertirse en un estratega corporativo clave para la competitividad del negocio.
La integración de la IA: de la experimentación al impacto real
Tras años de pruebas de concepto, los CIO afrontan en 2026 el reto de escalar la inteligencia artificial de forma segura, gobernada y alineada con objetivos de negocio concretos. La prioridad ya no es experimentar, sino integrar la IA en procesos críticos, automatizar operaciones, mejorar la toma de decisiones y generar impacto directo en eficiencia y crecimiento.
Este despliegue exige infraestructuras robustas, capacidad de procesamiento, gestión avanzada del dato y un enfoque riguroso en seguridad y cumplimiento normativo.
Ciberseguridad: un modelo preventivo ante amenazas más sofisticadas
La ciberseguridad se mantiene como una de las principales preocupaciones. El aumento de la sofisticación de los ataques y la ampliación de la superficie de exposición obligan a adoptar modelos de seguridad preventiva basados en inteligencia artificial, monitorización continua y una gobernanza del riesgo integrada en la estrategia corporativa.
Normativas como NIS2 refuerzan la necesidad de enfoques estructurados que combinen tecnología, procesos y personas para garantizar la continuidad del negocio.
Infraestructuras resilientes y conectividad avanzada para un entorno híbrido
Los CIO deberán asegurar que sus infraestructuras tecnológicas estén preparadas para soportar entornos híbridos, cargas intensivas de datos y modelos de trabajo distribuidos. La resiliencia, la alta disponibilidad y la conectividad de alto rendimiento se consolidan como requisitos imprescindibles.
En este contexto, los centros de datos evolucionan hacia modelos más eficientes energéticamente, sostenibles y orientados a maximizar la continuidad operativa, en línea con las exigencias regulatorias y los compromisos ESG de las organizaciones.
“Todas estas prioridades confluyen en un reto común: la alineación efectiva entre tecnología y negocio. En 2026, los CIO serán evaluados no solo por la estabilidad de los sistemas, sino por su capacidad para traducir la inversión tecnológica en resultados tangibles”, explica Carlos Castillo, Chief Business Officer de Grupo fibratel. La experiencia de clientes y empleados, así como la competitividad global, dependerán cada vez más de esta conexión estratégica.
