La privacidad, las políticas y el precio guiarán el panorama tecnológico en 2024

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Este año, los fabricantes de software previsiblemente rebajarán sus precios como forma de competir entre ellos y atraer así a nuevos usuarios, mientras que algunas empresas podrían comenzar la transición hacia la nube privada y las aplicaciones on-premise para proteger la privacidad de sus datos.

Las tendencias tecnológicas de 2024 vendrán marcadas por un contexto económico global complejo, la necesidad de salvaguardar la privacidad y seguridad de los datos y el impulso en la regulación del uso de determinadas tecnologías.

"Los gobiernos son cada vez más conscientes de la importancia de proteger la información de sus ciudadanos. Esto llevará a muchos de ellos a construir su propia infraestructura tecnológica y a diseñar políticas según las necesidades de cada país, para evitar que los datos se utilicen de forma ilegal o poco ética", afirma Sridhar Iyengar, director general de Zoho Europa. "Además, la posible recesión debida al descenso del comercio y la búsqueda de rentabilidad obligarán a las empresas tecnológicas a competir con precios más bajos para captar nuevos clientes".

Estas son las principales tendencias que presentará la industria tecnológica durante el presente año:

1. La 'comoditización' de la IA

La inteligencia artificial se convertirá en una mercancía, similar a los motores de búsqueda y los correos electrónicos. Las aplicaciones que no aprovechen sus ventajas estarán destinadas a desaparecer, mientras que su uso será cada vez más transparente para los usuarios. Los fabricantes de software se darán cuenta de que no será posible obtener beneficios en su promoción; en cambio, todo su valor residirá en sus integraciones.

Un ejemplo de ello son los nuevos modelos de ingesta de datos (ETL) que ya incluyen la IA en sus procesos sin necesidad de desarrollar prácticamente nada de código, lo que facilita su uso en procesos con un gran volumen de información, acelerando las operaciones. Una vez integradas, aplicaciones como esta resaltarán el papel de la IA como una parte intrínseca de todo el conjunto de herramientas de BI (Business Intelligence).

2. La evolución del BI

Las empresas dependen cada vez más de múltiples aplicaciones. En este sentido, la analítica empresarial unificada permitirá integrar a la perfección los datos que procedan de distintas fuentes, lo que facilitará un análisis exhaustivo y desde distintas perspectivas para las empresas. Además, gracias a la IA se mejorará la identificación proactiva de cambios en las métricas y la notificación instantánea a los usuarios que se hayan designado previamente.

Por otra parte, las funcionalidades integradas de ciencia de datos y aprendizaje automático (DSML) comienzan a incorporarse a los flujos de trabajo de BI, lo que permitirá a los usuarios entrenar, construir, desplegar y gestionar modelos de aprendizaje automático predefinidos y personalizados. El BI evolucionará hacia analíticas y diagnósticos avanzados, ya no solo generando informes de datos sino también realizando análisis inteligentes que posibiliten la toma de decisiones fundamentadas.

3. Precio y rentabilidad

El contexto macroeconómico muestra una posible recesión mundial durante este 2024, que comenzará en Estados Unidos e impactará en Europa. Al disminuir el comercio, existe la posibilidad de una contracción del PIB mundial.

El sector tecnológico no será inmune a esta realidad, y las empresas que no sean rentables no sobrevivirán. Esto supondrá un reto especial para las compañías que cotizan en bolsa, ya que se verán obligadas a subir los precios o reducir sus operaciones para mantener los resultados exigidos por sus accionistas. “Dada la incertidumbre económica, las empresas tienden a ser más cautelosas con sus gastos. Si las empresas de software no consiguen captar nuevos clientes, tendrán que reducir precios; de lo contrario, los clientes recortarán gastos y optarán por proveedores más baratos", añade Iyengar.

4. Políticas y regulación

Algunos países y la Unión Europea tienen proyectos de ley o muestran interés por comprender y regular la IA para salvaguardar la privacidad de sus ciudadanos. Este es el caso del acuerdo alcanzado por la Unión Europea con la reciente Ley de IA, que se configura como el primer marco regulatorio a nivel mundial sobre esta tecnología.

La Unión Europea ha declarado que "la normativa pretende garantizar que los derechos fundamentales, la democracia, el Estado de Derecho y la sostenibilidad medioambiental estén protegidos frente a la IA de alto riesgo, al tiempo que impulsa la innovación y convierte a Europa en líder en este campo". La normativa establece obligaciones para la IA en función de sus riesgos potenciales y su nivel de impacto.

5. Regreso al “on-premise” y a la nube privada

Para mejorar la seguridad y privacidad de sus datos, algunas grandes organizaciones o las que operan en sectores regulados considerarán la posibilidad de utilizar su propia infraestructura para almacenar y gestionar la información. Esto podría suponer para algunos un aumento del uso de la nube privada y del software on-premise por dos razones: los costes prohibitivos de las grandes nubes públicas y el aumento de la importancia de la privacidad de los datos.

6. Reducir la subcontratación

Este 2024, muchas empresas podrían eliminar "capas" en sus procesos para reducir los costes de producción. Para ello, buscarán soluciones de software llave en mano que les permitan gestionar y centralizar nuevos procesos sin incurrir en altos costes e implantaciones complejas.

7. Sostenibilidad como objetivo prioritario

Cabe esperar que se introduzca una mayor regulación en materia de ESG (Environmental, Social and Governance) para garantizar que las empresas limiten cualquier posible daño y que aporten un mayor valor añadido a las comunidades en las que desarrollan su actividad, así como al resto del mundo.

Sin embargo, las empresas que vayan más allá del cumplimiento y, por tanto, sigan normas más estrictas en materia de ESG, tendrán más probabilidades de fidelizar a sus clientes. Es más probable que aspectos como la creación de un beneficio socioeconómico más amplio formen parte de su cultura, en lugar de estar impulsadas únicamente por el cumplimiento.