Un 71% de la industria manufacturera y un 64% del sector financiero ya están formando a su personal. Los perfiles especialistas en IA sólo representan el 0,3% del mercado laboral en la actualidad, siendo estos mayoritariamente perfiles cualificados en matemáticas, estadística, informática o ingeniería.
Casi dos tercios de las empresas están empleando o probando soluciones para mejorar el desarrollo de productos, operaciones, gestión de la fuerza laboral y gestión de la cadena de suministro. Las restantes están realizando inversiones estratégicas en tecnologías como gemelos digitales, IA industrial o IoT.
El retraso en la implementación de estas inversiones podría reflejar que estas áreas están en etapas iniciales, lo que brinda a los CSO la oportunidad de asumir un rol proactivo. El 54% de los CSO afirmaron desempeñar un papel de apoyo, en lugar de un papel de liderazgo, en la definición de la estrategia de IA.
Los CIO necesitan que sus CxO trabajen juntos y colideren con ellos. En 2025, más del 80% de los CIO de EMEA planean aumentar las inversiones en ciberseguridad, IA/GenAI, inteligencia empresarial y análisis de datos. Solo el 14% priorizará la creación de una fuerza laboral tecnológica en toda la empresa.
Más de la mitad han reducido tanto las emisiones de carbono como la intensidad de las emisiones desde que se adoptó el Acuerdo de París en 2016. El 42% de los líderes empresariales esperan que la IA reduzca las emisiones, frente a un 27% que prevé que aumentará las emisiones a corto plazo.
Ambas tecnologías están transformando la gestión de gastos al permitir que las empresas analicen grandes volúmenes de datos en tiempo real, facilitando la identificación de patrones y tendencias que antes podían pasar desapercibidos. Esta mayor visibilidad sobre los gastos permite detectar áreas de mejora.
El 66% creen que los centros de datos aportan valor a través de oportunidades de empleo y el 62% que contribuyen al crecimiento económico en el área local. Los impactos negativos más seleccionados por los ciudadanos son el elevado uso de energía, la creación de residuos electrónicos y el uso del suelo.
La adopción de la IA y el uso de los datos podría generar un ahorro medio anual de más de 600.000 millones de euros en distintos sectores, y demostrar la viabilidad financiera de las iniciativas sostenibles. La inteligencia artificial ofrece un gran potencial para transformar el sector agrícola.
El 45% de las compañías del sector se sirve de la inteligencia artificial para la gestión de riesgos y ciberseguridad, y el 36% para marketing y ventas. Casi tres de cada diez ya emplean la IA para operaciones específicas, como el análisis de enfermedades y la fabricación y desarrollo de medicamentos.
Los CIO deben gestionar los beneficios de la IA como una cartera, y administrar los riesgos y las recompensas en toda esta cartera. También deben crear pruebas de concepto que prueben cómo escalarán los costes, no solo cómo funciona la tecnología, y nuevos enfoques para gestionar y proteger el acceso a los datos.
El 67% de los ejecutivos de contact center considera que la interacción contextualizada con el cliente durante las interacciones será el resultado empresarial más impactante de la IA generativa en 2025. El 72% de los ejecutivos de marketing hace hincapié en la necesidad de un programa integrado de Voz del Cliente.
Al invertir en IA generativa, el 81% aspira a mejorar la satisfacción y retención de los clientes, el 76% busca reducir los costes operativos y el ahorro de tiempo, y el 72% planea mejorar la gestión de riesgos y las medidas de cumplimiento. El sector de los seguros es el más preocupado por las implicaciones éticas de la IA.
La IA no solo ayuda a comprender los impactos del cambio climático, sino que también ofrece soluciones innovadoras para abordarlos de manera proactiva. Además, los algoritmos de IA pueden optimizar las estrategias de mitigación de riesgos, como la gestión de recursos hídricos y de desastres naturales.
Dell apuesta por adoptar infraestructuras energéticamente eficientes en el centro de datos, elegir un modelo aaS, aplicar configuraciones de energía adecuadas a los dispositivos, y adoptar un enfoque holístico, para que los líderes de toda la organización integren estrategias basadas en la IA.
Crece la desconfianza sobre el valor y la aportación real de la tecnología al negocio. En un periodo de tres años todas las grandes empresas dispondrán de un responsable de rendimiento que aportará unos ahorros de entre un 15% y 30%. Un 40% ya integra a profesionales para tratar de reducir los costes.
El Alcance 3 incluye las emisiones indirectas de carbono generadas a lo largo de la cadena de valor de una empresa. Nextbitt dispone de una solución basada en IA que automatiza la lectura de documentos y facturas de proveedores, permitiendo extraer los datos necesarios para el cálculo de estas emisiones.
Las compañías nacionales están dos puntos por encima de la media global en el despliegue de la IA, aunque a nivel internacional hay un empate entre otras herramientas basadas en la IA y la conversacional generativa. El aprendizaje automático y la realidad virtual presentan un 41% y un 34% de uso.
Los proveedores de software están unificando la automatización y la IA para ofrecer plataformas, flujos de trabajo y procesos más inteligentes. La automatización inteligente puede conducir a conocimientos de los procesos de negocio que contribuyen a la innovación y la ventaja competitiva.
La inteligencia artificial está evolucionando para convertirse en un miembro proactivo de las empresas. El software autoevolutivo y el análisis emocional están llevando la interacción humano-máquina a nuevos niveles de profundidad, mientras que la computación cuántica promete ser la próxima gran revolución tecnológica.
Se espera que en 2027 el 93% de las empresas españolas ya apliquen IA para optimizar su información financiera. Las empresas esperan que sus auditores lideren, inspiren y acompañen la transformación de la información financiera a través de la IA, con auditorias en tiempo real que contribuyan a mitigar los riesgos.